El socialista François Hollande y el conservador Nicolas Sarkozy buscaron ayer en entrevistas y mítines cortejar, cada uno a su manera, a los votantes de la ultraderechista Marine Le Pen, cuyos 6,7 millones de seguidores en la primera vuelta del pasado domingo podrían ser relevantes en la ronda del próximo 6 de mayo.
"El voto a Le Pen no es un voto contra la República porque se expresa dentro del marco de la República", defendió el presidente y candidato conservador en un mitin en Longjumeau, a las afueras de París, en rechazo a quienes sitúan el apoyo a la líder del Frente Nacional (FN) fuera del sistema.
Entre esos seguidores, que otorgaron a ese partido un máximo histórico del 17,9%, la inmigración se presenta según sondeos recientes como su principal preocupación, y ese fue un tema que marcó su discurso y que los medios consideran que será estratégico para los dos contendientes.
Sarkozy no alude durante la campaña a una hipotética alianza con la extrema derecha, pero sí lanza mensajes que parecen pensados especialmente para atraer a su flanco a sus seguidores e invertir con ellos la tendencia del pasado domingo.
"No podemos seguir recibiendo tantos extranjeros", aseguró en declaraciones concedidas a la televisión pública "France 2", donde explicó que su intención es reducir a la mitad el número de foráneos llegados cada año y aprovechó para recalcar que la intención de su contrincante es "regularizar a todo el mundo".
El derecho al voto de los extranjeros en los comicios locales se presentó ayer como un tema destacado del día, del que Sarkozy dijo que seguirá siendo "exclusivo de los ciudadanos franceses" y Hollande que, de acuerdo con su programa, será puesto en marcha a lo largo de su eventual quinquenio.
El equipo del socialista en estas dos últimas semanas de campaña, según los medios, tiene ante sí la labor de convencer de que la derecha no posee el monopolio del "patriotismo", mientras que el del presidente va a insistir en su voluntad de renegociar el tratado de Schengen y de restaurar las fronteras económicas.
Desmienten supuesta “caza”
Ejemplo del deseo de dar "confianza" a todos los electores y de lanzar un mensaje de esperanza fue el desplazamiento ayer de Hollande a Aisne, departamento donde con el 27,1% de los votos, apenas superó por un punto a Le Pen (26,33%).
"Me dirijo a todos los electores y electoras. (...) No hago distinciones", señaló el candidato, quien en entrevista al diario "Libération" difundida ayer indicó que parte del electorado de Le Pen procede "de la izquierda y debería volver a encontrarse al lado del progreso, de la igualdad, del cambio".
Pero con ganas de desmentir esta supuesta caza de los votantes de la extrema derecha recalcada por los medios nacionales, el socialista quiso dejar claro que no ha cambiado ni va a modificar su política en esta segunda parte de las presidenciales.
"No quiero seducir ni hacer concesiones. Los franceses quieren un presidente que mantiene su postura, no uno que cambia cada vez de propuestas", agregó en la cadena TF1 el favorito según los sondeos, que dijo que desde que se presentó a las elecciones ha sido "coherente y constante".
La voluntad de separarse de esa interpretación de los medios fue expresada también por el primer ministro, François Fillon, según el cual, tal y como apuntó en el telediario de "Canal+", esa estrategia "no tiene ningún sentido".
Para el jefe del Gobierno francés, el rol de los responsables políticos es ahora analizar los resultados de la primera ronda, encabezada por Hollande (28,63 %) y por Sarkozy (27,18 %), y "extraer las consecuencias" tanto de los mismos como del "voto de crisis" acumulado por la ultraderechista.
Francia radiografía al electorado de Le Pen
Políticos y sociólogos radiografían al electorado de Marine Le Pen, que superó las previsiones de los sondeos en la primera vuelta de las presidenciales galas, con un resultado histórico para el ultraderechista Frente Nacional (FN).
La derrotada más victoriosa de los comicios reunió 17,9 % de apoyos y 6.421.802 millones de votos, de los que el 44% la eligió "por oposición" al resto de candidatos, según el instituto CSA.
Suma casi un millón más de votos que el histórico resultado del conjunto de la ultraderecha en el 2002, cuando su padre, Jean-Marie Le Pen, accedió a la segunda vuelta con un 16,86% de los sufragios, por delante del socialista Lionel Jospin.
No obstante, entonces la suma de los partidos de extrema derecha reunió más porcentaje de voto que Marine Le Pen diez años después (19,2 % frente al 17,9 %), con los electores de Bruno Mégret (2,34 %).
Según una encuesta de Ipsos, el 60 % de los votantes del FN votará a Sarkozy, el 25 % al socialista François Hollande y el resto se abstendrá.
Los estudios de opinión señalan que Marine Le Pen logró capitalizar buena parte del voto de los jóvenes y las categorías socioeconómicas más modestas, superando a la extrema izquierda.
"Cuanto más bajo es el nivel de estudios, más elevada es la probabilidad de votar al FN. El punto de inflexión es el examen de acceso a la universidad", analiza en "Liberation" Nonna Mayer, politóloga que apunta que un 30% de los que no han superado ese nivel vota a la ultraderecha.
Los sondeos muestran que Le Pen convenció del 23 al 29% de los obreros, por delante del candidato socialista y vencedor de la primera vuelta, François Hollande (27-30 %).
El caladero de votos de la candidata de extrema derecha encuentra entre los pequeños comerciantes, los obreros (esencialmente hombres) y las mujeres proletarias y del sector servicios, según Mayer, quien resume que "el prototipo es la cajera del supermercado".
Le Pen supera ampliamente en esas categorías a Jean-Luc Mélenchon, candidato del Frente de Izquierda apoyado por el Partido Comunista, que se situó como la cuarta fuerza política (11,10 %) y recaudó solo el 13 % del voto obrero, según CSA.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015