Opositores políticos de Al Asad rechazan su papel en futuro de Siria

EFE | LA PATRIA 

La Coalición Nacional Siria (CNFROS), principal alianza política opositora, ha reiterado su rechazo a que el presidente del país, Bachar al Asad, tenga algún papel en una hipotética transición en el Estado árabe, informó hoy la organización.

Los miembros de la Oficina Política de la CNFROS se reunieron el domingo con representantes de grupos armados sobre el terreno para analizar la situación que está emergiendo actualmente, según se explica en un comunicado de la CNFROS.

Los asistentes al encuentro expresaron su repulsa a "los intentos para reflotar" la figura de Al Asad después de que "el pueblo sirio haya sufrido miles de mártires, daños en sus ciudades y el desplazamiento de millones" de personas.

También, consideraron que la presencia rusa en el suelo sirio "para proteger a Al Asad" no sirve para lograr una solución política al conflicto.

En ese sentido, recordaron que Rusia no ha ejercido de mediador, sino que ha sido "un socio del régimen", por lo que alertaron que el despliegue de efectivos rusos en el territorio sirio "solo complicará la situación".

De esta manera, la CNFROS reaccionaba ante las especulaciones de las últimas semanas en los medios de comunicación internacionales sobre la posibilidad de que Al Asad tenga un papel en la Siria de posguerra.

Moscú ha expresado su determinación de apoyar al régimen de Damasco en su lucha contra el grupo terrorista Estado Islámico (EI) y no descarta intervenir militarmente en Siria si así lo piden sus autoridades.

Rusia, de hecho, ha desplegado sobre el terreno varias compañías de infantes de Marina, cuyo cometido es garantizar la seguridad de dos feudos gubernamentales sirios estratégicos: la base naval rusa de Tartus y el aeropuerto de Latakia.

En una entrevista este fin de semana a la televisión estadounidense CBS, el presidente ruso, Vladimir Putin, reconoció que la presencia militar de su país en Siria tiene como objetivo sostener al régimen de Al Asad, al que considera una pieza clave para frenar la hasta ahora imparable expansión de los yihadistas.