EFE | LA PATRIA | LISBOA
Portugal llora la muerte del histórico dirigente socialista y expresidente Mário Soares, quien falleció ayer a los 92 años en Lisboa. Era considerado una figura clave en la construcción de la democracia de su país.
Jefe del Estado luso entre 1986 y 1996, Soares murió pasadas las tres de la tarde en el Hospital Cruz Roja de la capital portuguesa, donde permanecía hospitalizado desde el 13 de diciembre, acompañado por sus dos hijos.
El expresidente ingresó en situación crítica y, tras una mejoría temporal, su estado de salud volvió a empeorar y se mantenía en coma profundo desde el día 26.
El Gobierno decretó tres días de luto nacional, a partir del próximo lunes, por el fallecimiento del patriarca socialista, a quien despedirán en un funeral con honras de Estado el martes siguiente.
Mário Soares es el primer presidente electo de la democracia lusa que fallece y es considerado una de las figuras políticas portuguesas más importantes por su decisiva participación en la transición a la democracia cuando la Revolución de los Claveles puso fin a la dictadura de Salazar (1926-1974).
Se presentó a unas últimas elecciones presidenciales en 2006, con 81 años, las únicas que perdió durante su larga carrera política.
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