Beatriz Pascual Macías
Efe | LA PATRIA | Washington
La renuncia del general James Mattis como secretario de Defensa de EE.UU. provocó ansiedad e incertidumbre dentro del país y entre los aliados de Washington. Temen que su salida permita al presidente Donald Trump, dar rienda suelta a sus peores instintos.
La Casa Blanca insistió a través de su portavoz, Sarah Sanders, que el general James Mattis hizo lo correcto al presentar su dimisión como jefe del Pentágono, después de meses de diferencias con Trump, y un día después de que se anunciara el repliegue de las tropas estadounidenses de Siria.
Por su parte, los aliados de EE.UU. en el mundo despertaron ayer con la noticia de la salida de Mattis.
"Lo que separa a EE.UU. de otros países es su estrecha red de alianzas y la lealtad de sus amigos. El general Mattis entendía esto. Trump no, como demuestra la retirada de las tropas de Siria. Con Mattis, la última voz de la razón abandona la Administración", afirmó el presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Bundestag alemán, Norbert Röttgen, aliado de la canciller alemana, Angela Merkel.
Respeto
En su carta de renuncia, Mattis hizo una férrea defensa del sistema de alianzas de EE.UU. en el mundo y opinó que Washington debe tratar a sus aliados con respecto, así como ser "resuelto e inequívoco" en la forma en que lidia con sus competidores, entre los que mencionó a China y Rusia.
Entre tanto, el Gobierno francés, muy activo en el conflicto en Siria, lamentó la salida de Mattis y cuestionó las palabras de Trump, al asegurar que proclamó esta semana la derrota del EI en Siria para justificar su decisión de replegar las tropas.
Mattis ha sido un gran defensor de la alianza de EE.UU. con Europa y, en numerosas ocasiones, defendió la importancia de la OTAN, alianza militar que fue criticada por Trump debido a que algunos países europeos, como Alemania, no cumplen con sus compromiso de gasto en defensa.
La portavoz de la Alianza, Oana Lungescu, aseguró que el secretario Mattis hizo una contribución clave para mantener a la OTAN fuerte y preparada para enfrentar importantes desafíos en seguridad y, además, consideró que Mattis es ampliamente respetado como soldado y diplomático.
Perro loco
En sus meses al frente de la cartera de Defensa, Mattis, un general de cuatro estrellas retirado y con amplia experiencia en combate, logró dejar atrás su reputación de guerrero sanguinario hasta el punto de que, según medios locales, un Trump siempre dado a poner motes acabó por referirse a él como "Perro moderado".
Mattis nació el 8 de septiembre de 1950, en Richland (Washington) y se alistó en el Cuerpo de Infantería de Marina a los 18 años.
En 1991 combatió en Irak, durante la operación Tormenta del Desierto y tras los históricos atentados del 11 de septiembre del 2001 fue desplegado en Afganistán, como comandante de las fuerzas de vanguardia de los marines.
Esta experiencia le valió para asumir la dirección del Mando Central de las Fuerzas Armadas de EE.UU. en agosto de 2010, durante la presidencia del entonces presidente, Barack Obama (2009-2017).
Tras más de cuatro décadas de carrera militar, Mattis dedicó su vida civil al mundo académico como profesor de asuntos relacionados con el liderazgo, la estrategia y la seguridad nacional.
A finales del 2016 Trump le ofreció hacerse cargo del Departamento de Defensa.
"La misión del Ejército es dotar de argumentos a nuestros diplomáticos", repetía con frecuencia James Mattis..
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015