JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
"La ciudadanía lo debe tener claro, la Universidad no se atravesaría en un proyecto de ciudad, pero también hay que cuidar los intereses patrimoniales de la institución educativa".
Con estas palabras, Carlos Tadeo Giraldo Gómez, miembro del Consejo Superior de la Universidad de Caldas, destacó a título personal y sin que sea vinculante para el Consejo Superior, la expectativa del encuentro que se tiene previsto para hoy del Consejo Superior Universitario. El objetivo es analizar si se acepta o rechaza la propuesta de Infimanizales para comprar un predio de la institución de unos 1.900 metros cuadrados, cerca del Edificio de la Asociación de Egresados. Allí se construiría una estación de la Línea 3 del Cable Aéreo.
El encuentro se realiza, después de la notificación que hizo Infimanizales por $2 mil 305 millones 814 mil 400 el pasado 18 de julio, acompañado además de la advertencia de la expropiación administrativa/judicial.
Varias amenazas
Aunque el gerente de Infimanizales, Alejandro Arango Castro, sostuvo que no es que se vaya a expropiar al día siguiente y que el plazo es hasta el 30 de este mes, tanto miembros del Consejo, como algunos concejales y gremios expresaron su preocupación por esta negociación donde ya prima una advertencia de expropiación.
No es la primera vez. En agosto del año pasado, el exrector de la Universidad de Caldas Alejandro Ceballos Márquez le confirmó a LA PATRIA que había amenazas de expropiación. "Nosotros hemos sido muy claros que tenemos todo el ánimo de dialogar con Infimanizales, con la Secretaría de Planeación y con el alcalde. Con nadie más, ni con el director de proyectos, porque lo único que se ha hecho desde ese Departamento es amenazar a la Universidad en términos de que si no negociamos nos van a expropiar", aseveró.
Su malestar se centró en que en los diálogos previos, el director de proyectos, en cabeza de Jaime Gómez Díaz, les reiteró que estos bienes son de interés público, y que al igual que cualquier propietario, si no se venden, se tendrán que expropiar, argumento similar al que planteó la Alcaldía en el Concejo de Manizales.
El rector destacó que entre las averiguaciones que han hecho, se determinó que si la Alcaldía lo quiere, puede expropiar. Sin embargo, cuando esto suceda, también tendrá que existir compensación, y eso implica otro acuerdo.
El malestar
Todos estos antecedentes mantienen las alertas y el malestar de varios ciudadanos por esta negociación.
De acuerdo con Giraldo Gómez, es vital entender que la Universidad como ente universitario autónomo tiene unas dinámicas y unos estamentos que también deben ser escuchados. "Es lo que creemos que debe primar hoy en el Consejo Superior, y tener en cuenta los estamentos, no solo del Consejo Superior, sino estudiantil y profesoral y administrativo, por lo que debe primar es el buen juicio entre dos entidades públicas", destacó.
El abogado especialista en derecho administrativo y minero energético, insistió que la U. es un patrimonio, no solo de Caldas sino del país, por lo que se tiene que llegar a un análisis sin sesgos. "Lo que está haciendo la Alcaldía está en la Ley, pero también entiendo que hay un interés de negociación, y por eso vamos a revisar todo esto hoy, apoyándonos como ciudad y su desarrollo, pero teniendo en cuenta que tampoco se perjudiquen los intereses del patrimonio de la U".
La Sociedad Caldense de Ingenieros y Arquitectos (SCIA) también expresó sus preocupaciones sobre la Línea 3 del Cable, por lo que les pidieron a Infimanizales y a Ideas Más los estudios de los suelos donde se construirán las estaciones y las pilonas; el levantamiento topográfico del cable y los lotes donde se ubicarán las estaciones; además de varios diseños, como los arquitectónicos, estructurales, eléctricos y electromecánicos, junto con los presupuestos detallados, plazo de ejecución y la lista de predios requeridos y avalúos.
El vicepresidente de junta de esta sociedad, Ricardo Spaggliari Vásquez, también insistió que les preocupa que no haya acuerdos con la Universidad y se notifique de una posible expropiación. "Cuando a usted lo amenazan, así sea basado en la Ley, eso no es bueno. Eso comienza a generar conflicto, no es la presentación de una negociación, pues la universidad también defiende sus derechos y no va a regalarle o venderle al municipio por un menor valor", indicó.
También cuestionó los tiempos, pues los plazos normales de construcción de este tipo de cables rodean los 35 y 41 meses, basados en los proyectos en Bogotá, Medellín y Pereira. "Entonces resulta demasiado ingenuo que aquí se pretenda hacer en 16 meses y comprometer al constructor con una fecha que no va a lograr", aseveró.
En una carta que le envió el exrector de la Universidad Alejandro Ceballos al alcalde de Manizales, Carlos Mario Marín, el pasado 27 abril, planteó siete dudas con respecto a la negociación con la U.
1. Malentendido o una errada formulación de los estudios previos. El inmueble es de la U. de Caldas, de nadie más.
2. No hay un negocio jurídico con la U. para entrar en posesión o dominio del inmueble.
3. Hay discrepancias con los avalúos de los predios, dadas las fallas de tipo técnico.
4. Los negocios jurídicos propuestos por la Alcaldía no fueron cumplidos ni llevados a cabo.
5. No hay ninguna autorización del Consejo Superior, por lo que no se han comprometido los bienes de la institución.
6. Las especificaciones técnicas de la estación son inviables, supera en más de 2,5 veces la altura del bien cultural.
7. Son improcedentes las intervenciones del Bien de Interés Cultural (BIC) por su valor patrimonial.
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