LISET ESPINOZA
LA PATRIA | MANIZALES
No es la primera vez que el fotógrafo Carlos Pineda investiga los carros de la cultura cafetera. En el 2018 hizo que el lector viajara por el mundo de los buses escalera con su libro Chivas, arcoiris del camino, y ahora lo invita a inspeccionar Yip, vehículo que en el 2020 fue declarado patrimonio cultural colombiano.
El material gráfico lo recopiló desde el 2008 mientras que la investigación le tomó un año, pues consultó textos en inglés debido a los pocos en español que registran la historia. Tampoco es un experto en carros, pero el saber más sobre el origen de este automor que atraviesa cualquier trocha lo llevó elaborar este libro que también registra fotos en blanco y negro de la Biblioteca Nacional del Congreso de los Estados Unidos y del Centro Nacional de Archivos de Holanda.
Fotos | Carlos Pineda | LA PATRIA
Según Carlos Pineda, el yip aparentemente es igual, pero hay muchas diferencias y ha evolucionado desde su creación en 1940. En la imagen una caravana de yiperos de Manizales en la vereda La Isabela, de Santa Rosa de Cabal (Risaralda).
Recorrido
"Cuando empecé a leer sobre el yip decía que había sido diseñado en cinco días y me parece algo imposible porque ni hoy que está todo lo digital y las herramientas se hace. Este carro es gringo y ahí me di cuenta que había una historia fascinante detrás de él que no se sabía al menos en Colombia y en español", comentó.
Al indagar el libro usted se enterará de cómo nació el yip, el papel que tuvo en la segunda guerra mundial, los modelos que han existido, cómo pasó de ser un carro militar a convertirse en uno civil y su llegada a Colombia.
Según Carlos, a veces por la cotidianidad o la costumbre se dejan de percibir ciertos elementos que hacen parte de la cultura como lo es el yip. Por ello, su objetivo es dar a conocerlo como parte de la cultura de la región.
"Cuando salí del país me di cuenta de que hay muchas cosas valiosas por mostrar. Creo que en Colombia, Pakistán y en la India el yip es un elemento importante dentro del sistema vehicular. Además, en nuestro país revolucionó la industria del café porque antes se transportaba en mulas y con él se podía transportar la carga de 13 mulas", comentó.
En su investigación descubre que estos carros no los inventó Willys, sino que son el resultado de una investigación que comienza desde la primera guerra mundial, pero después el Ejército se une con una empresa privada que son los que desarrollaron los modelos. En la imagen un yip militar MB.
El libro lo puede conseguir a través de:
*La cuenta de Instragram de Carlos Pineda (@carlospinedaphoto)
*Manizales: En las librerías Libélula, Intermusica y Ágora.
*Bogotá: En las librerías Lerner, Fondo de Cultura Económica y Wilborada
*Medellín: En las librerías Lerner y Fondo de Cultura Económica.
El Willys de tapa plana (como en el de esta foto) se encuentran en Quindío y norte del Valle del Cauca. En Caldas, Risaralda, norte del Tolima y sur de Antioquia se ve el yip que llaman orejiperro. Su nombre se debe a que el guardabarros es curvo a diferencia de los de tapa plana. Se ven con frecuencia en la galería. En la imagen un Willys CJ-2A.
Un yipao agrícola en Armenia, Quindío.
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