Toros: Trabas difíciles de lidiar

Luis Felipe Molina

LA PATRIA | Manizales

Han pasado 27 días de este año y al parecer las noticias taurinas en Colombia suceden más por fuera de las plazas que en los ruedos. La mirada de la ley por el inciso y no por el derecho, la presión social por lo que se denomina políticamente correcto y un constante crecimiento de la humanización de los animales han puesto a la tauromaquia bajo dos funestos escenarios: La incomprensión y el abuso.

A pesar de ser un espectáculo reglado por la ley y cumplirse a cabalidad – al menos en las plazas de primera categoría como Manizales-, por estos días nada contra la corriente para poder mantenerse con vida por una obcecación que busca terminar con esta tradición cuya comprensión no es obligatoria.

Dos situaciones recientes ponen de nuevo a pensar a los defensores de la causa taurina y a los aficionados en general sobre el futuro de esta práctica: la doble cancelación de la temporada taurina de Medellín y el intento de cambio de La Macarena, y la negativa de un permiso para la realización de una corrida en Manizales que se ha hecho tradicionalmente, lo que no significa que deba realizarse anualmente.

Local

Para hoy se había proyectado la llamada “Gran corrida de remate de feria”, una celebración que data del siglo pasado y que no se realiza anualmente. Para esta corrida, que sería la toma de alternativa del novillero caleño Juan Camilo Alzate, se esperaba el regreso a los ruedos de Guillermo Perla Ruiz y la visita del diestro español José Ignacio Uceda Leal. Toros de la ganadería de San Antonio de Los Lagos para un cierre de un enero taurino que tuvo la tradicional temporada y la novillada bufa conocida como los Enanitos Toreros hace una semana.

La Alcaldía de Manizales, que ha dicho varias veces que respeta la ley y a los taurinos, decidió negar el permiso argumentando que solo encontraron en sus archivos dos ocasiones de la realización de la corrida de cierre, 2000 y 2016, por lo tanto, explicaron, no se acomoda a una tradición y tampoco a la ley porque esta demanda ser “periódica, ininterrumpida”, sin responder allí a periodicidad alguna. Aficionados, por redes sociales, publicaron facsímiles e imágenes de otras corridas que no tuvo en cuenta la Alcaldía para esa misma ocasión.

Esta decisión, conocida el lunes pasado, desató la inconformidad de aficionados que se apostaron el viernes en la plazoleta de la Alcaldía para protestar por una medida que consideran arbitraria e injusta.

Unos consideran que Manizales, por tratarse de una plaza de primera categoría, no debía consultar al mandatario local para la realización de la corrida, otros creen lo contrario. Sin embargo, es positivo ver que la afición manizaleña resolvió defenderse, más cuando este año es electoral y algunos volverán a tomar los toros como pretexto politiquero.

Otras corridas

Entre las corridas que se han celebrado el Día de la torería manizaleña está el mano a mano entre Andrés de los Ríos y Guillermo Perla Ruiz, el 21 de enero del 2007; y el 24 de febrero del 2002 con una corrida mixta.

Medellín

La crisis de Medellín es ampliamente conocida. Primero se vende la mayoría de las acciones de la plaza de toros a un grupo de entretenimiento, lo que obliga a liquidar Cormacarena. Luego, se logra un acuerdo con este grupo para una temporada de tres domingos que finalmente se cae por la presión política del alcalde Federico Gutiérrez.

Taurinos de esa ciudad, liderados por el ingeniero y aficionado Mauricio Brand, publicaron una carta abierta en la que piden a Ricardo Peláez, cabeza de D'Groupe SAS, entidad que ahora tiene el 51% de la plaza de toros, que reconsidere sus intenciones de hacerle cambios interiores a la plaza con el fin de convertirla en una arena de conciertos o entretenimiento.

“La Macarena es un inmueble objeto de protección especial debido a su calidad de bien de interés cultural por su valor histórico, arquitectónico y social para la ciudad de Medellín … y ante la imposibilidad actual de levantar nuevos escenarios para las corridas de toros, se atenta

contra el espíritu de estas leyes si se modificase sustancialmente el inmueble”, dice la carta.

La lucha en Medellín ahora es doble; por mantener su plaza de toros y por procurar llevar de vuelta la temporada dado que el año que viene otros serán los mandatarios locales.