De Macbeth a Mendoza fusilado

LA PATRIA | MANIZALES

Sangre, traición y lágrimas podría resumir a Mendoza. Al menos él y su esposa Rosario conspiraron durante dos horas para asesinar a Montaño, líder campesino, en la sala de teatro el Galpón de la U. de Caldas. Y lo lograron. Murió a puñaladas sangrientas.

La escena empieza con una bruja que cuenta sus augurios a una gallina y le anuncia al general Mendoza, de la revolución mexicana, que será gobernador. Aquí empieza la cadena de violencia que sufrirán 10 personajes.

Rosario se entera de la predicción y con el deseo de grandeza que la invade convence a Mendoza de asesinar a Montaño y ocupar su posición. Como dice ella: "Una gran mujer al lado de un gran hombre, pero cobarde".

Mientras las obras se desarrollan en un cambio de puestos, el escenario se rodeó de espectadores que conversaron con los actores.

Mendoza acepta las pretensiones de Rosario, y como en Macbeth, mata a Montaño. Una tragedia a la mexicana. Con sonidos de guitarra, engaños y codicia logra ser gobernador.

Cada triunfo le ofrece una nueva víctima que morirá por miedo de que le arrebate el poder y a los espectadores les da una celebración con cervezas y máscaras tradicionales.

La adaptación de Shakespeare devela la historia violenta de la revolución mexicana del siglo XX, con cara falsa que guarda las intenciones de un corazón traicionero. Al final Rosario se suicida y el público fusila a Mendoza y lo celebra con cervezas y aplausos a los actores.