"32 años orgullosamente laborados en el Magisterio"

Hay una experiencia que marcó la labor de la aguadeña Olga Patricia Osorio Ramírez, premiada el pasado jueves como la Docente del Año 2011 en Manizales.

"Una adolescente, que llegaba siempre a contarme sus historias, se acercó y me dijo que necesitaba que habláramos urgentemente. Yo, en medio de los afanes, atendiendo una cosa y la otra, le dije que debía entrar a una reunión y que al otro día a primera hora la buscaba para hablar. Finalmente ingresé a la reunión. Al otro día pregunté por ella y me dijeron que se había suicidado la noche anterior. Creo que cargaré con ese peso todo mi vida. La lección que me dejó es que antes de ser académicos, somos seres humanos". 

Para Osorio, ser docente es un privilegio que le ha dado la vida. Su familia también ha mostrado un amor especial por la docencia, de ahí que tres de sus tías también enseñan, una de ellas fue su profesora cuando pequeña en el colegio Claudina Múnera, de Aguadas. 

Habla de Aguadas como "uno de los sitios más fríos, pero calurosos de Caldas, hija de mi terruño, enamorada del pionono, el sombrero y la poesía".  

Su labor como maestra se inició en una escuela de la zona rural del Departamento, cinco años después llegó a Manizales al colegio Isabel La Católica, después pasó al Cooperativo, y desde hace 12 años, y hasta la fecha, está en la Normal Superior de Caldas.  

En su experiencia laboral también está su paso por algunos colegios privados de Manizales y la vinculación a la Universidad de Caldas como asesora de prácticas de la Licenciatura de Lenguas Modernas, programa del cual es egresada y magíster en didáctica de inglés.

Además, es par académica del Ministerio de Educación desde hace dos años, visita normales en el país y ha dictado unos 20 cursos a maestros, formándolos en amor al arte. Actualmente es la profesora de inglés del grado 11 de la Normal, y coordinadora de la jornada complementaria de los grupos 12 y 13, que se preparan para ser docentes.

Fuera de eso escribe poesía, por eso se nota esta inspiración cuando responde.

Experiencias

"La docencia es la manera de trascender, sembrar, creer que los seres humanos podemos evolucionar, transformarnos y tener la esperanza de que alguien pueda reconocer nuestro talento. La magia de la educación es recibir pequeñas arcillitas y transformarlas en seres humanos. Nosotros dejamos muchas huellas en los estudiantes, la mayoría de las veces positivas, pero también algunas de ellas duras", expresa la maestra.

Uno de los lemas que ha llevado Osorio hasta las aulas de clase es que "se aprende enseñando y se enseña aprendiendo", pues dice que cada día aprende de sus alumnos y viceversa.

Ella está casada y es madre de una niña de 13 años. Ha escrito y publicado dos libros: Sembrando con alma de mujer y La cosecha de la vida.

Alegre, humanitaria, sensible...

Personas cercanas a la Docente del Año 2011, Olga Patricia Osorio Ramírez, coinciden en que sus cualidades son ser una persona alegre, humanitaria, sensible y amorosa, tanto en su vida personal como de trabajo.

Dora Isabel Ortegón, profesora de Sociales de la Normal Superior de Caldas, que la conoce hace 18 años, cuenta que le dice: "usted fue hecha con palabras de poeta", pues es una enamorada de las letras y en cada expresión suya hay palabras de inspiración.

"Como compañera debo decir que es una gran persona y ser humano, su solidaridad y respeto sale a relucir en cada uno de sus actos". Ortegón también resalta su excelente relación con los alumnos de todos los grados.

Otra compañera, Judit Arias, docente de lenguaje, y también oriunda de Aguadas, dice que Olga Patricia es irrepetible en todo sentido y le ha dicho en varias ocasiones que si nace otra como ella, no se cría. "Es una mujer delicada, solidaria y excelente colega".

María Aracely López, actual secretaria de Educación de Manizales es su cuñada y fue su jefe mientras estuvo como rectora de la Normal Superior de Caldas. Destaca de la Docente del Año su capacidad de servicio, vocación como maestra y entrega a los estudiantes. "Algunos la llaman la madre. Para ella no hay horario, lo más importantes es cumplir con su trabajo".

Los 32 años de experiencia de esta docente y su compatibilidad con las lenguas la llevaron a desarrollar un proyecto que busca enseñar desde la primera infancia las lenguas extranjeras, a través del arte y la música.

Este fue catalogado por el Ministerio de Educación como una experiencia significativa de impacto para la región, ya que actualmente es aplicado en varias instituciones públicas.

En las aulas

El hecho de que Osorio esté gran parte del día sonriente, con buen semblante y trate a sus alumnos con amor, no quiere decir que no sea exigente y perfeccionista a la hora de dictar clases. "En ella no cabe la mediocridad, los trabajos que hacemos en su clase deben ser bien hechos. Para mí es la mejor profesora, siento que nos enseña con el corazón", cuenta Ana María García, una de sus alumnas de jornada complementaria.

Juan David García, de grado 11, se refiere a su profesora como una persona de una gran calidad humana, todo el tiempo está dispuesta y disponible para las cosas que sus alumnos le pidan. "Todo el tiempo nos habla inglés, de esa manera hemos aprendido el idioma".