
Anserma | LA PATRIA
Vidrios rotos, amenazas en redes sociales, grafitis con mensajes ofensivos y otras intimidaciones enfrentó una docente de Anserma por cumplir con su labor educativa.
Según colegas de la profesora, las agresiones surgieron porque una alumna no aprobó una materia, lo que desencadenó en la pérdida del año escolar. "La estudiante convenció a otros tres compañeros para intimidar a la docente", comentó una fuente.
Las agresiones se iniciaron el año pasado. La docente no lo hizo publico, pensando que no trascendería. Luego llegaron daños materiales al vehículo de su hijo y las amenazas se prolongaron. Esto la motivó para que comentara el caso ante sus compañeros de trabajo.
"Estuvimos pendientes de su integridad e identificamos a los menores que causaban este daño", explicó un directivo de la institución.
La comisaría de familia se encargó de la denuncia. Actúo en compañía de la institución educativa para identificar a los estudiantes, que fueron citados a una reunión para conciliar.
"Expresaron que no había razones que justificaran sus hechos, que lo hicieron por cosas de muchachos. No pensaron en las consecuencias de sus actos. Los padres de familia ofrecieron disculpas a la afectada y se comprometieron con estar más pendientes de sus hijos", expresó el directivo.
En la conciliación, además del compromiso de respeto hacia la profesora, se acordó pagar cerca de $2 millones para la afectada. Ruth María Álvarez, funcionaria de la comisaría de familia de Anserma, hizo un llamado a los padres para que eduquen a sus hijos en casa. "Los jóvenes hacen lo que quieren, no hay correctivos en el hogar".
El directivo del plantel les recordó a los estudiantes que no deben tomar acciones por su propia cuenta. "Si un estudiante se siente afectado debe seguir las instancias necesarias. En los colegios hay comités de convivencia y está la rectoría, siempre estamos dispuestos al diálogo. Si por alguna razón no son escuchados, también hay instancias legales".
A los jóvenes no los expulsaron, pero sí fueron sancionados. Dos fueron retirados de la institución por sus padres. En el colegio explicaron que en estos casos hay que ayudarlos y que deben aprovechar a la orientadora escolar para solucionar problemas de convivencia, con el fin de no interrumpir los procesos educativos.
Reciente
– A principios de septiembre, en Manizales, a un alumno de derecho, de la Universidad de Caldas, lo llevaron a audiencia por amenazar a una profesora. La intimidaba porque perdió una materia.
– En agosto amenazaron una docente a través de una llamada, donde le exigieron que se fuera del pueblo (Marmato). Después la volvieron a llamar y aseguraron atentar contra su hijo si no se iba en una semana.
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