LA PATRIA | Manizales
La historia, como asignatura en colegios, ha dado vueltas. 1984: Dejó de ser materia autónoma. 1994: Desapareció del pénsum y se fusionó con Ciencias Sociales, combinada con Geografía, Democracia, Constitución Política. 2017: Por decreto, en diciembre se ordenó revivirla de manera independiente.
Joan Llusà Serra, licenciado en historia, magíster en didáctica de las ciencias sociales de la Universidad Autónoma de Barcelona (España) considera que la medida en Colombia, de finales del año pasado, es una equivocación.
Serra con otros 27 expertos participa en el Primer Congreso Internacional de Didácticas, que organizan la Alcaldía y la Universidad de Manizales. 600 profesores asisten a los talleres que comenzaron ayer y seguirán hoy y mañana.
Ayuda mutua
Joan Llusà Serra es profesor en la Facultad de Educación de la U. Autónoma de Barcelona. Expone con Neus González, de la misma institución, sobre didácticas en las ciencias sociales.
- ¿Por qué considera que la historia no debe ser una materia autónoma en los colegios?
Creemos que las ciencias sociales es una, parcelar las disciplinas a estas alturas de nuestro mundo es una equivocación. Ya el autor Edgar Morin, sociólogo francés, dice que debemos acabar con la hiperespecialización de nuestras universidades porque en este mundo complejo en el que vivimos debemos resolver un poco desde esa red que genera la ayuda mutua de todas las disciplinas. Las ciencias sociales, creemos, que no deben separarse.
- ¿Cuál es la importancia de las ciencias sociales en el mundo de hoy?
La historia, la geografía y las ciencias sociales en general son la base y el único camino que nos permite interpretar nuestro mundo, que es muy complejo, muy global, muy cambiante y muy incierto. Tenemos que disponer de instrumentos para entenderlo y luego intervenir en él eficazmente y construir el futuro que queremos todos.
- ¿Qué debe hacer un profesor para enamorar a los alumnos de materias como las sociales?
Quizá una de las cosas que más preocupa a los estudiantes es su nivel académico. Obviamente es importante porque no podemos partir de una base sin una buena carga teórica, pero posiblemente es por un lado la emoción, la pasión por enseñar. El hecho de estar preparados a nivel didáctico, pedagógico. La suma de la motivación, la preparación permanente creo que pueden permitir a los futuros maestros desarrollar unas actividades en el aula que realmente formen estos ciudadanos que queremos y que desde nuestras facultades forman unos ciudadanos críticos, que se enfrentan a su mundo y participan activamente en él.
Joan Llusà Serra, docente de la U. Autónoma de Barcelona (España).
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015