Luis Felipe Castrillón
Estudiante I.E. Malabar
Esta es María del Carmen Castrillón. Es oriunda de las montañas andinas del Eje Cafetero, de ascendencia campesina de la que aprendió que la buena arepa es la que ella misma muele con ese en la máquina de moler, el mismo nombre que acompaña a esas familias encargadas del desmonte para preparar el terreno para el cultivo.
Conoció en persona al Putas de Aguadas, es más, se enfrentó a él y salió triunfante. Ella, tiene un genio de señor y padre nuestro, ese que le permitió sacar pa´ lante el combo familiar, tal cual matrona.
Ella es mi abuela, quien desde las 3:30 a.m iniciaba las labores de las tradicionales familias de Filadelfia, Aguadas y Aranzazu. El cambio del lugar, del topos de cemento como extensión de la ruralidad, pues en la casa que habitara establecía su pancoger y su buen galpón.
"Para mi abuela no hay mejor remedio que la planta de prontoalivio, limoncillo, salvia, etc. que mantenía colgadas en las paredes del patio".
Es orgullo para lo que ahora, los eruditos de la burbuja universitaria de antropología, sociología y demás, llaman la soberanía alimentaria y custodios de lo ancestral, porque eso sí, para mi abuela no hay mejor remedio que la planta de prontoalivio, limoncillo, salvia, etc. que mantenía colgadas en las paredes del patio a la luz de la Luna entrante y menguante, ese era su tiempo, el tiempo de abril, de mil lluvias hasta la borrasca de mayo y la construcción del crucifijo con lentejas, cháncharos o frisoles, arroz y de guardar unas cuantas monedas de baja denominación.
Mi abuela aún guarda bajo el brasier al Sagrado Corazón de Jesús, a la Virgen de Carmen, al Niño Jesús de Praga, son sus santos que alientan su espíritu de lucha, porque ella lucha, lucha contra los años, contra las injusticias cuando ve por televisión las protestas de las dignidades campesinas y los policías que golpean a su gente.
Ella solo ve porque es sorda, se quedó sorda luego de una caída cuando limpiaba el baño de una de las familias de élite ilustre que no cumplía con los derechos laborales. Ella es mi abuela la que representa a las que levantaron solas a la familia, dado la cobardía de muchos hombres: a ellas feliz Día de la mujer.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015