Óscar Veiman Mejía
LA PATRIA | Manizales
La lista de gastos de un colegio es larga: dotaciones pedagógicas como mobiliario, textos, audiovisuales, licencias, mantenimiento de muebles, adquisición de bienes de consumo, repuestos, accesorios, herramientas, enseres, papelería, publicaciones, pago de servicios públicos, contratación de servicios técnicos, actividades pedagógicas. Y más, mucho más.
Por eso, los rectores están con los pelos de punta, pues aún el Gobierno Nacional no gira los recursos que les deben llegar por la gratuidad de las matrículas.
José Román Molina, rector del Colegio Agropecuario Las Coles de Pácora, indica que sin esa plata es posible que se frene el funcionamiento de los centros educativos. "El año pasado nos pagaron en dos partes, una en febrero y otra en julio".
Adalberto Serrano es el presidente de la Asociación Nacional de Docentes Directivos de la Educación Oficial Colombiana (Asodic). Dice que si las cosas siguen así, a partir del 16 de abril declararán lo que llaman emergencia administrativa. Eso significa: suspensión de expedición de certificados y constancias, por ejemplo, lo que perjudicaría a padres y estudiantes.
Mantenimiento
Las transferencias llegan a los colegios a partir de la gratuidad educativa, entendida como la exención del pago de derechos académicos y servicios complementarios.
Para el rector de Las Coles las cuentas se complican, ya que el centro educativo es agroindustrial. "Hay que hacerles mantenimiento a las máquinas y sin plata no hay prácticas para los alumnos, nos quedamos solo con la teoría".
Asodice recuerda que la ley ordenó no cobrarles a las familias, para garantizar el acceso y la permanencia de los niños en elsistema educativo, pero que obliga al Estado a entregarles los recursos directamente a los establecimientos educativos oficiales.
Los rectores coinciden en que por fortuna aún tienen dinero de reserva del año pasado. William Estrada, rector de la Institución Educativa Rafael Pombo en Marmato, dice: "Por lo general cada colegio tiene un avance para gastos iniciales. Yo dejo un saldo esperando a que nos consignen este mes".
La Asociación concluye: "Lo más grave es que a estos recursos, exiguos e insuficientes para el funcionamiento de los colegios, debe sumársele la tardanza en su giro, dejando a la institución expuesta a la incertidumbre, a la suerte, a los malabares que el ordenador del gasto (rector) pueda hacer, para satisfacer las múltiples necesidades que tiene un establecimiento".
Respuesta
El Ministerio de Educación, por medio de su departamento de Comunicaciones, respondió que a más tardar a finales de abril distribuirán los recursos. Explican que esa repartición depende de la verificación de matrícula de cada vigencia anterior, en este caso, la del 2017. "Estamos en esa verificación". Añade que ya les informaron a los secretarios de Educación para que las instituciones estén al tanto de la situación.
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