Fotos | Freddy Arango |LA PATRIA
Ayer en la tarde reinaba una relativa soledad en la Terminal de Transporte de Manizales, y solo había unas 30 personas dispuestas a viajar.
JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
Hasta el deseo de viajar se frenó con el actual paro agrario nacional.
Pese a la relativa calma que se ha mantenido en Caldas, excepto por los hechos violentos protagonizados por personas que se han infiltrado en el paro, en los sectores de Irra (Risaralda) y Chinchiná (Caldas), los manizaleños no quieren viajar. Sienten temor de que los frenen en las carreteras o se generen posibles intentos de robo.
De acuerdo con el reporte de la Terminal de Transporte de Manizales, el número de despachos se redujo en las últimas semanas entre el 27% y el 31%, al pasar de un movimiento diario promedio de 7 mil 500 a 8 mil pasajeros, a solo unos 5 mil 500.
Según Jhon Jairo Prieto, gerente de la terminal, el descenso ha sido continuo, aunque se mantiene la oferta de buses y a la fecha no existe restricción de las empresas para salir o entrar a la ciudad.
Reconoció que los pasajeros expresan sus dudas y temores por la serie de tropiezos en pasos como el de Chinchiná, e incluso por Maltería, vía a Bogotá, aunque la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC) solo frena el paso de los camiones, sin afectar el flujo de particulares, buses, busetas y ambulancias.
Empresas como Transporte Unión Anserma resalta que de un despacho diario de 13 buses y unos 5 taxis, en la actualidad solo se están enviando un bus y una buseta.
Algo similar estima William Hernán Patiño, jefe de rodamiento de Expreso Sideral, quien destacó que los despachos hacia Medellín han sido tan complejos, que de unos 7 vehículos diarios, cada uno con ocho personas, hoy solo se están enviado tres, con tres o cuatro personas en promedio.
La razón es el paro y el paso obligado por Irra, hecho que aumenta la tensión. "Los podríamos mandar por Filadelfia, por ejemplo, pero a muchos no les gusta, y además se mantiene la incertidumbre sobre el paso", aseguró.
Luz Chilatra, quien viajaba ayer para Cali, expresó el temor por la inseguridad, motivo por el cual antes de iniciar su recorrido, averiguó cómo estaba la vía y prefirió salir hacia las 2:00 p.m.
Transportes Armenia destaca que aunque han tenido un despacho normal de unos 42 buses diarios, el número de pasajeros se ha reducido, al punto que en ocasiones viajan solo seis a siete personas, explicó Rodolfo González, despachador.
Para Bogotá el comportamiento ha sido estable, pese a lo cual Expreso Palmira reconoce que han sido pocos los viajeros, por el mismo temor de posibles hechos violentos.
José Luis López, despachador de Transportes Irra, sostiene que mientras el promedio de viajeros por vehículo es de 15 personas hacia Belalcázar y Risaralda, hoy se estiman unos cinco o seis.
Mientras Marina Betancurt observaba ayer su negocio "Artesanías Mi Casita", ubicado en la Terminal, aseguró que las ventas cayeron casi en un ciento por ciento. De un promedio de $200 mil a $250 mil diarios, ahora solo vende entre $5 mil o $10 mil diarios.
A la salida de la Terminal la situación es parecida. Los taxistas Raúl Ospina y Jairo Quintero hablaban con otros compañeros de la mala situación. Aseguran que en un día normal hacen hasta 20 carreras, pero debido al paro hacen ahora solo dos a tres. "La tranquilidad aquí, es que no hay más gastos de combustibles y rodamientos, y por eso preferimos esperar, pues está peor en la ciudad".
Hernando Mejía, quien lleva 40 años trabajando en el sector de Maltería, como guía y ayudante de los camioneros para cargar y descargar mercancía, asegura que estos días han sido terribles.
"Pasé de ganarme $15 mil a $20 mil diarios para la panelita a ni un solo peso. Vivo de estos carros y ahora no sé qué hacer", indicó.
Mientras tanto los transportadores de la ACC estuvieron pendientes ayer de una reunión con el viceministro de Transporte, Nicolás Estupiñán, quien al final no llegó.
20% se han reducido en promedio los ingresos de la Terminal de Transporte.
De acuerdo con el reporte de la Policía, alrededor de 33 capturas se efectuaron en Chinchiná el pasado jueves, luego de los nuevos actos violentos del jueves pasado en la noche.
Por esta razón, la Alcaldía anunció que ayer se efectuaría toque queda desde las 8:00 p.m. hasta las 6:00 a.m. de hoy, y hoy nuevamente se aplicaría desde las 8:00 p.m.
El comandante de Policía Caldas, coronel David Benavides Lozano, sostuvo que se trata de hechos violentos de un grupo de menores de edad que se quieren poner de fiesta el pueblo, en su mayoría del barrio La Frontera.
"Aquí lo importante es que los medios de comunicación no los involucren en el paro, pues son actos delincuenciales y no están haciendo ninguna petición, sino que quieren desestabilizar la región".
Sostuvo que se reforzará la seguridad de la región con un total de 2 mil 600 hombres, justo para este fin de semana que serán las elecciones para gobernador.
Los trabajadores de las minas de Marmato madrugaron ayer a la carretera central con un solo propósito: continuar las protestas que iniciaron el mes pasado en contra del Código Nacional Minero. Este gremio se sumó ayer al paro nacional agrario, que hoy completa seis días.
Hombres y mujeres se ubicaron al lado de la carretera que de Manizales conduce a Medellín, algunos en los potreros de Moraga, a la entrada de Marmato, y los otros se acostaron sobre el pavimento, a esperar a que llegaran otros compañeros.
El presidente de la Asociación de Mineros de Marmato, Mario Tangarife, pidió que los escuchen y les aprueben las peticiones planteadas en la mesa de diálogo nacional. "Le exigimos al gobierno que nos deje trabajar en calma. Vamos a realizar protestas pacíficas. Todos tenemos que tomar conciencia y apoyar la causa de forma voluntaria, vamos a protestar pacíficamente”, les decía.
Mientras los mineros dialogaban, unos agentes ponían conos por un carril de la vía, para dar inicio a la protesta, similar a la que realizaron hace un mes. Los asistentes caminaron un kilómetro hasta el parador El Paisa. Gritaban arengas e invitaban a los campesinos a que hicieran parte de la huelga.
La producción minera del municipio fue suspendida ayer, para que los obreros asistieran a la movilización. Durante el tiempo que duren las protestas, trabajarán media jornada.
El mes pasado los mineros protagonizaron enfrentamientos con la Fuerza Pública, que dejaron una veintena de heridos, entre uniformados y civiles.
* Luz Chilatra: no, voy para Cali, pero uno sí mantiene mucho temor de que pase algo.
* Mary Marín: ante todo es mucho temor, pero he viajado hacia Pereira sin problemas.
* Amparo Salazar: de Anserma hacia Manizales sí nos tocó caminar un trayecto. Hay mucho temor.
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