EQUIPO BALANCE
LA PATRIA | MANIZALES
El Movimiento Indígena de Caldas, de las comunidades de Riosucio y Supía, le pusieron ayer otra cara a la nueva jornada de protesta que hoy completa 30 días de reclamos y malestar contra el Gobierno nacional.
Cuatro chivas y cerca de 200 representantes de 6 de los 17 cabildos de San Lorenzo, Cañamomo- Lomaprieta, La Trina y Cauroma, entre otros, se hicieron presentes en el Parque del Agua, con el fin de partir desde allí hasta el Teatro Los Fundadores y reclamar por el respeto a sus derechos, de forma pacífica.
Mientras tanto, otras tres protestas se alistaban desde el punto que va hacia Neira y desde las glorietas de San Rafael y de La Fuente, todas para llegar al mismo lugar de encuentro.
Clamor indígena
Marta Hernández, presidente del Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS) de Caldas, explicó que, aunque hay derechos diferenciales que están escritos en el papel, realmente no les ponen cuidado a sus peticiones, como es el proceso de erradicación de cultivos ilícitos, pero con una consulta previa libre e informada. Eso unido al irrespeto en sus territorios y la muerte de líderes en Colombia.
Hacia las 10:30 a.m comenzaron las movilizaciones con chirimías, cantos, bailes y arengas contra el Gobierno y los repetidos cantos como "este no es un Gobierno, son los paracos en el poder...".
Hacia la 1:30 p.m. se comenzaron a concentrar en el sector de Fundadores, mientras otros participantes bloquearon el paso por las carreras 20, 21 y la Avenida Paralela, a la par con la Santander que estaba con la mayoría de protestantes. En la Carrera 23 los vendedores informales también cerraron el paso.
Otro grupo de jóvenes prohibió la entrada al Centro Comercial Fundadores, por los reclamos que tienen contra el Éxito y su supuesto apoyo al Esmad. Decían que ese almacén, por lo menos en la tarde, no iba a facturar un peso más.
La división
Aunque físicamente la concentración se cumplió, como estaba previsto, con el paso de las horas se dividió. Si bien el llamado de las centrales obreras fue permanecer en el sector, otros jóvenes les reclamaron y expresaron su malestar, al insistir que no se sienten representados por ellos. Parte del reclamo de los jóvenes fue que algunos de los dirigentes de las centrales no los querían dejar hablar por los micrófonos. Finalmente les dieron la palabra.
Andrea Celis Buendía, estudiante del Sena y quien pidió intervenir, explicó que el problema es que falta unión y que las mismas centrales se den a conocer. "Lo que pido es que podamos hablar, porque es cierto que si nos dividimos esto se pierde, pero el interés es que haya unión de ideas, que decidamos de manera conjunta, que podamos dialogar. Es complejo, porque sentar tantas cabezas es difícil, sin embargo, es lo que tenemos que hacer como sociedad".
Óscar Arturo Orozco, miembro principal de la CUT, explicó que este es un espacio para todos y que es bienvenido el reclamo. "Recogemos todas las peticiones y harán parte de los llamados nacionales".
Algunos muchachos, en medio del debate, anunciaron su decisión de irse para el sector de la Panamericana. A eso de las 4:30 p.m ya habían bloqueado la glorieta de Los Cámbulos. Una hora más tarde se logró dar paso con la intervención del Esmad.
Otros prefirieron quedarse en Fundadores y más tarde se fueron, unos más mantuvieron bloqueado el acceso al centro comercial. Mientras Andrea reiteró, tal y como lo dijo públicamente: "No creo que el cambio esté en los bloqueos".
Bloque en vía y sin ingreso al centro comercial
Mientras los manifestantes estaban concentrados en Fundadores, un grupo de jóvenes se instaló en la calle 33B, frente al centro comercial Fundadores, para protestar en contra de la cadena de supermercados Éxito. Asimismo, tres de ellos, se ubicaron en la entrada principal bloqueando el ingreso al lugar. Según un integrante de la protesta, quien se identificó como Andrés, hicieron sus arengas allí porque: “En el Valle hemos visto como una de las instalaciones del Éxito se prestó para que la Policía hiciera sumisión y torturara a jóvenes”. Esto, aunque en un comunicado hace un par de días, la cadena de supermercados aclaró que esos hechos no son ciertos. Ante esto, un representante de Derechos Humanos y del mismo centro comercial salieron a dialogar con los manifestantes y a explicarles que no debían impedir el paso, pues allí hay un punto de vacunación masiva. Sin embargo, a pesar de los intentos, los jóvenes continuaron allí.
Lina María Gutiérrez, gerente del centro comercial, lamentó el bloqueo. Sostuvo que se afectaron 200 marcas y 1.200 empleos ayer. "Está bien que quieran manifestarse y centrar una voz de protesta, pero ya afectan a todas las personas que dependen de un empleo". A las 2:00 p.m. las directivas del centro tomaron la decisión de cerrar.
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