JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
Solo mañana realizarán su primera reunión como miembros de la nueva junta directiva, motivo por el cual apenas comienzan a empaparse o a reconocer la actual situación que tiene la Industria Licorera de Caldas (ILC).
José Fernando Salazar es la primera vez que llega a la junta de esta empresa, por lo que su prioridad es conocer la radiografía de la ILC para tener un concepto más claro sobre su futuro.
Los otros tres ya han participado en otras administraciones, por lo que ya conocen de cerca el manejo de la entidad, pese a lo cual sostienen que se trata de una situación financiera diferente a la que conocieron antes, o por lo menos con unos resultados más bajos de los que solía tener.
Sin embargo, los cuatro representantes coinciden en que la compañía tendrá que buscar la salida a la difícil situación que ha tenido durante la última década, y repuntar, considerando que es la segunda mejor destilería del país. Eso, sumado a la calidad de sus licores, en especial del Ron Viejo de Caldas, que ha recuperado su liderazgo en el mercado nacional.
Bajo estas condiciones, los cuatro reconocidos empresarios resaltan que asumen esta nueva tarea con mayor responsabilidad, pues se trata de buscar estrategias para apuntalar la empresa, permitir que mejore sus ventas y generar una mayor rentabilidad.
Guillermo Arango Gutiérrez, representante de Prometálicos. Fue miembro de junta directiva en las administraciones de Emilio Echeverri (2004-2007) y de Francisco Prieto (2011):
"No sé en qué estado se encuentra hoy la ILC, salvo por los informes que a veces se dan a conocer. Sin embargo, en mi concepto, la principal meta es recuperar la destilería, con un mejor repunte en ventas y en ganancias, pues cuando estuve allí era una empresa que llegó a vender más de 31 millones de botellas y arrojaba utilidades de hasta $58 mil millones y cero pasivos, por lo que preocupa que se haya bajado a 15 millones o 16 millones de botellas. Nos dormidos con el mercado local y se ha perdido participación en el resto del país. Una tarea es fortalecer el mercado nacional, primero que todo, y mostrar la calidad de los licores de la empresa. No estoy de acuerdo con que se hable de la privatización de la destilería".
Néstor Buitrago Trujillo, empresario. Ha participado en las juntas directivas de la ILC, durante las administraciones de Tony Jozame y Emilio Echeverri.
"La prioridad es conocer cuál es el estado actual de la ILC. Apenas vamos a comenzar a
analizarla, pero lo que uno sabe, por lo que dice el periódico, es que ya reporta unas ventas muy bajitas y unas menores utilidades. Los últimos años han sido complicados para la ILC y eso contrasta con los resultados que se tuvieron durante la administración del doctor Emilio, donde se alcanzaron a tener reportes que rozaron los $60 mil millones en utilidades anuales. Sin embargo, los mercados son cambiantes, y las empresas tienen sus transformaciones, pero es vital comenzar a recuperar parte del mercado que se ha perdido, y superar los problemas, como el actual lío con el Valle del Cauca. Es muy difícil opinar sobre una posible privatización".
Héctor Mejía Aristizábal, presidente de junta directiva de Arme. Participó en las juntas directivas de Luis Alfonso Arias, Tony Jozame, Emilio Echeverri y Francisco Prieto.
"Hay que empezar con resolver el problema con el departamento del Valle del Cauca, ante la multa que presenta esa región, y demás demandas que hoy tiene la ILC. Desde luego tenemos que ver si somos capaces de lograr una reestructuración, con una mejor gestión de ventas, mirar los contratos y revisar las opciones de ampliar sus mercados y participación. Llegamos a tener ventas de más de 30 millones de botellas y, por eso, hay que volver a impulsar la empresa. Somos convencidos de que tenemos unos productos de muy buena calidad. Más que la privatización, soy amigo de las alianzas estratégicas para lograr unas mejores ventas en el exterior".
José Fernando Salazar Echeverri, fue superintendente de planta de la ILC. Participa por primera vez en una junta de la empresa.
"Tenemos muchas ganas de acertar y mejorar la situación de la ILC, pero ante todo consideramos fundamental superar problemas como los que hoy se tienen con el Valle del Cauca. En mi concepto, lo más delicado es la falta de recursos del departamento, por las bajas utilidades de la empresa. Una tarea vital en la empresa es fortalecer el mercado nacional, motivo por el cual se necesita analizar el mercadeo y chequear todas sus estrategias de ventas, distribuidores y cumplimiento de metas. Me parece muy triste que hoy la empresa esté en esta situación. No me suena mucho la participación de un privado. Además, porque para que esto suceda, primero se tendría que fortalecer la Licorera".
En cifras
* 15 millones 681 mil 559 botellas de 750 mililitros, las ventas de la ILC de marcas propias en 2012, por debajo de las 17 millones 15 mil 630 botellas en 2011.
* En el 2007 las ventas alcanzaron las 25 millones 531 mil botellas.
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