Fotos | Freddy Arango | LA PATRIA Según el Presidente de ANIF, Sergio Clavijo, si las cosas salen bien, es inminente que se acelere el crecimiento de Colombia del 5% al 6%, pero si salen mal, se pasaría del 5% al 4%.
JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
"Es necesario que dejemos de decir mentiras y gobernar apunta de titulares".
Con esta fuerte crítica, el presidente de la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF), Sergio Clavijo, cuestionó ayer varios indicadores de crecimiento del país, los problemas de infraestructura, el regular comportamiento de los sectores industrial y agropecuario, y lo mal preparados y retos que tiene que asumir Colombia ante la llegada del TLC con Estados Unidos.
Durante su participación en el seminario "Perspectivas económicas 2012 ¿cómo aprovechar el grado de inversión y TLC?", realizado en Manizales, el dirigente generó revuelo con sus críticas, justo cuando el ministro de Transporte saliente, Germán Cardona, acababa de decir que la locomotora del sector ya está bien aceitada y echando humo, y la subdirectora de la oficina de aprovechamiento del TLC, Olga Lucía Lozano, resaltó sus ventajas.
Pese a ello, Clavijo fue enfático en que si bien este año se podría crecer a una tasa del 5,5% en el primer trimestre del año, y en cerca del 5% para todo el 2012, cifras nada despreciables, su mayor preocupación es la composición de este crecimiento. Lo anterior considerando que la industria no va bien, y a duras penas el año pasado creció al 4%, dijo.
Esto sin contar la agricultura, que lleva un ritmo de solo el 2%, justo cuando se entra en un cuarto año de malas producciones de café y, si mucho, se llegará otra vez a los 8 millones de sacos.
"El mensaje entonces es muy sencillo. Bien por el crecimiento agregado, mal por la composición y pésimo en lo que tiene que ver con los avances en infraestructura".
A estos fenómenos y al menor crecimiento de este año, Clavijo también temió por el contagio que se genere ante el impacto económico de China, la desaceleración mundial, la crisis de Europa y una eventual desaceleración en Estados Unidos, más grave aún, siendo el principal socio del país.
Si bien el experto reconoció el auge minero-energético que hoy tiene el país, sostuvo que en gran parte es una "fantasía" ante las pocas reservas que se tienen y la caída en el precio del petróleo.
También resaltó la necesidad de invertir parte de estos recursos en infraestructura, considerando que se llegaron los TLC y aún se tiene un atraso, como mínimo de 6 años. "Si no hacemos la tarea, con buena gerencia y disponibilidad de recursos, nos van a a arrasar los TLC, porque no vamos a ser competitivos en productos diferentes a petróleo, carbón, ferroníquel y oro, ya ni siquiera en el café".
En estas condiciones, el presidente de ANIF planteó inversiones provenientes de un 10% de las ganancias de Ecopetrol para terminar obras como la doble calzada a Buenaventura, la Ruta del Sol y solucionar las vías de Medellín y Manizales, entre otras, pues para obras extraordinarias se necesitan recursos extraordinarios, advertencia que se hizo desde la administración Uribe, sostuvo.
Como si fuera poco, pronosticó que se van a paralizar los puertos, y no se ve que haya premura para hacer las obras y el dragado que se requiere en el canal de acceso de Buenaventura.
"Eso, a punta de caja del día a día, y esperando que venga el míster a ver si le parece que la Tasa Interna de Retorno (TIR) es atractiva, se nos irán otros seis años", resaltó.
Otro de sus temores y cuestionamientos con respecto a lo poco preparados para recibir el TLC con Estados Unidos, tiene que ver con la improvisación para mejorar el Invima, el ICA y la DIAN. "Pero no he oído del Gobierno ninguna cifra fehaciente que me diga cuáles son las apropiaciones presupuestales extraordinarias que se les están dando a esos organismos para la modernización".
Para el experto, esto no le genera tranquilidad, considerando que no es la forma de mejorar las condiciones fitosanitarias y de aduanas para actualizarse con la Unión Europa y los EE.UU.
"El Gobierno solo nos presenta la parte optimista. Si las cosas salen bien, vamos a generar 500 mil puestos de trabajo, pero si seguimos con la Enfermedad Holandesa, los vamos a perder", sostuvo.
Reiteró que el país está viviendo un proceso de desindustrialización desde hace cinco años, y dependiendo solo de la exportación de commodities o productos sin valor agregado, por lo que se teme por un auge importador.
"En Colombiana, a diferencia de lo que ocurre en Centroamérica o en Asia, no vemos nuevos proyectos de generación de empleo industrial, estamos viniendo a más de lo mismo porque no hay una infraestructura, ni una estructura de mercado laboral atractiva".
Otra de sus críticas fue la falta de claridad en la formalización laboral. Resaltó que aunque el gobierno dice que el 60% de la población económicamente activa está afiliada a la Planilla Integrada de Liquidación de Aportes (PILA), realmente ese porcentaje es del 15% y una vez cada seis meses del 30%. "Eso no es formalización laboral, hay que mirar las cifras que corresponden, que no me hablen de la creación de las nuevas 150 mil empresas en el último año. Hay que mirar las variables vitales y no las del titular", reiteró.
US$8 mil a US$10 mil millones de dólares, la Inversión Extranjera Directa que estima ANIF para este año, contra unos US$13 mil millones de dólares del año pasado.
Es un término que se refiere a las consecuencias negativas de un crecimiento intempestivo de la entrada de divisas a un país, por lo general por el descubrimiento de recursos no renovables. Entre las consecuencias de este fenómeno están la revaluación de la moneda local, que conlleva a la pérdida de competitividad de la industria exportadora con valor agregado.
5,9% creció la economía en 2011
"Colombia no es un portento petrolero, está raspando la olla de Cusiana y Cipuagua para mantener el millón de barriles de exportación, donde aún no estamos, pero sin nuevos hallazgos, estamos con solo siete años de reservas petroleras, contra los 300 años que tiene Venezuela, eso sí es un portento petrolero".
El exministro de Transporte y próximo embajador de Colombia ante el Vaticano, Germán Cardona, sostuvo que si bien Colombia tiene un atraso en infraestructura, su tarea fue concentrarse en la estructuración de obras para dejarlas bien planeadas, al punto que hoy ya se han adjudicado 16 corredores viales que alcanzan entre obras nuevas y ampliaciones, unos $3,6 billones.
A esto sumó que esta semana se abrirán licitaciones por $1,2 billones adicionales para mantenimientos viales en todo el país.
Con respecto a Caldas sostuvo que la región no queda abandona con los proyectos que tanto anhela. "Puede que me vaya del Ministerio, pero no del Gobierno, hay una amistad desde hace muchos años con el Presidente Santos, prueba es el paso a la Embajada ante la Santa Sede, y voy a estar muy pendiente", sostuvo.
Con respecto a sus frustraciones habló sobre Aerocafé. Sostuvo que fue muy sincero ante la petición de hacer un alto en el camino y determinar primero cuánto va a costar. Aún así, reiteró que hay un compromiso del actual Gobierno de respaldar este proyecto, una vez se tengan resultados.
Frente a los recursos para el próximo año, resaltó los cerca de $13 mil millones que ya se apropiaron, pese a lo cual reiteró que este es el pez pequeño, pues falta el tiburón y es saber exactamente cuánto vale el aeropuerto, cifras que se conocerían hacia octubre.
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