Mineros de Marmato siguen pegados al Burro

RICHARD AGUIRRE

LA PATRIA | MANIZALES

Marmato, Caldas. 9 mil habitantes aproximadamente. 27 grados centígrados.

Aliste casco, botas y linterna que vamos para una mina. Oro, lomas, montañas y calles empedradas son símbolos del municipio aurífero de Caldas, además de las mulas que llevan troncos de madera, los cuales sirven como soporte para formar los socavones dentro de las minas.

Esta película es protagonizada por José Edilson Henao y Ancízar Suárez, quienes llevan 26 años dedicados a la minería. Empezaron artesanalmente y ahora han incorporado lentamente la tecnología a su diario vivir.

El mineral es explotado en las casi 150 minas que hay en el cerro del Burro. Las minas de roca maciza son soportadas por troncos de 2 metros de largo y 4 arrobas de peso, que funcionan como fuertes vigas. Es normal que las mulas o burros carguen estos elementos hasta el cerro, amarrados a sus costados. Las bestias suben 200 kilos de peso por unos mil metros en cada recorrido.

Martillar, sacar, moler o triturar son los pasos que se deben sortear para que el mineral sea extraído. El cianuro cumple la función de separar el mineral de la veta (roca).

Aunque para algunos en Marmato se ha vuelto a sentir un auge minero, en especial estos últimos meses, de acuerdo con José Edilson y Ancízar esta actividad siempre ha sido dinámica, pese a las presiones de las grandes compañías y el estigma que han tenido en algunos casos, por aquello de ilegales.

Exterior: 10:30 de la mañana. Mina La Milagrosa #1.

José Edilson Henao. Casco, botas, camisa café y yin.

Tiene 56 años, es del Valle del Cauca y vive en Marmato desde 1978. No duda en comentar que la minería es una labor peligrosa. "Hay que saber trabajar, porque es muy duro y no todo el mundo puede hacerlo", explica mientras se come dos empanadas con una gaseosa. "La clave de la minería está en ser precavido", sostiene.

Interior: 11:00 de la mañana. Mina La Milagrosa #1. Oscuridad.

A 500 metros de profundidad dentro de la montaña. "Aquí hay que caminar agachadito", sugiere. Solo avanzamos 20 metros porque no tenemos ni casco ni botas y mucho menos linterna; nos ayudamos con las linternas de los celulares. "Hasta aquí podemos llegar", dice don José. La Minería es un trabajo peligroso, se trabaja con explosivos, cincel y mazo. Es incómoda. Regularmente se trabaja agachado, para evitar accidentes. "Cuando llega alguien nuevo le enseñamos todo el proceso, siempre insistimos en la precaución".

Salimos de La Milagrosa #1. Subimos unos 400 metros sobre la montaña.

Hay un hombre bajo la sombra de un árbol, no lleva camisa, tiene yin azul y botas. Fuma.

Exterior: 11:35 de la mañana. Mina San Antonio.

Ancízar Suárez, 51 años de edad.

Ancízar tiene tres hijos, es separado y asegura que todo lo de la minería es duro. "El trabajo es muy complejo, arrancar minerales, martillar y activar cargas explosivas. La incomodidad y en algunas minas la humedad complican el trabajo".

Critica a las grandes empresas que llegaron al municipio. "Desestabilizaron a muchos marmateños que se dedicaban a la pequeña minería. Lo que hicieron fue dejar sin trabajo a mucha gente". Según él, de allí nace la minería ilegal, pues las personas que no tienen un sustento se meten a las minas que no son de su propiedad y las explotan.

Interior: 11:55 de la mañana. Mina San Antonio. Oscuridad.

Las linternas de los celulares vuelven a guiarnos. Caminamos 10 metros y hay un orificio de 12 metros de profundidad y 100 metros hacia dentro de la montaña. "Yo ya hice las "escaleras" y para trabajar aquí hay que tener mucha experiencia", dice Ancízar, mientras se sostiene de una cuerda. Hace un pequeño descenso para enseñarnos el proceso.

Vuelve a la superficie y caminamos 30 metros más. Hay un cruce y posa para la foto. "Marmato ha cambiado demasiado en los últimos 20 años, ahora la labor es más tecnificada porque antes todo era a mano".

Al despedirnos asegura que en la mina trabajará hasta los últimos días de su vida.

El comercio

Si bien no hay grandes almacenes, Marmato sí cuenta con ferreterías, restaurantes pequeños y tiendas. Hay una sola vía, situación que dificulta la entrada y la salida de la maquinaria que sube hasta el cerro del Burro, donde hay unas 150 minas. José Edilson Henao dice que en el municipio no falta nada. "Aunque en pequeñas cantidades, se encuentra de todo".

La seguridad

Estos dos mineros concuerdan en que el municpio es tranquilo. "La seguridad es buena, porque entre los marmateños nos cuidamos y nos conocemos", dice Ancízar, pero critica que no falta el que quiere hacer "daños".