RICHARD AGUIRRE
NEGOCIOS | LA PATRIA
Gerardo Cortés tiene un carro de dulces en la esquina de la carrera 22 con calle 18 en Manizales. Para surtir su negocio siempre revisa cuál es la marca por la que más le preguntan. "En dulcería, Colombina manda la parada. Es lo que más se ha vendido toda la vida", sostiene.
Sin embargo, a la hora de hacer el mercado para su hogar ya no revisa las marcas, sino los precios y visita varios supermercados para encontrar un respiro en su bolsillo, apretado en los últimos meses. "La situación está muy dura, entonces uno se orienta más por las promociones y los precios bajos", agrega.
Con él está de acuerdo Julieth Restrepo, quien visita hasta cuatro supermercados para encontrar otros precios y variedad. Así decide cuáles son los productos más económicos. "Por ejemplo, me gustan las marcas Zenú y Roa, porque son tradicionales, pero ahora buscamos economía", resalta.
Otra visión
María Margarita Beltrán, de la firma consultora Kantar Worldpanel, sostiene que a pesar de que muchos miran principalmente el precio, aún se mantiene una tendencia de consumo pensando en las marcas. "Dentro de nuestro estudio vemos que hay productos que han llegado a nuevos hogares, como Aromatel, Rendy, Horneaditos, entre otras. Esto evidencia que los hogares están dispuestos a comprar y probar, no solo por su marca, sino por los beneficios reales que pueden identificar al usar o consumir un producto", explica.
De acuerdo con la firma, siete marcas de alimentos, cinco de aseo y cinco de bebidas registraron una mayor ganancia de nuevos hogares durante el año pasado en Colombia, debido a su innovación, variedad, costo, beneficio y distribución. "Hoy el consumidor está dispuesto a seguir invirtiendo en nuevos productos, por lo que la industria tiene la oportunidad de desarrollar más momentos de consumo y dinamizar el mercado colombiano", sostiene Andrés Simon, director ejecutivo.
Pese a ello, la ama de casa María Rubiela Torres, señala que anteriormente se fijaba más en las marcas. Caso Familia, si era papel higiénico o Alpina, en la mantequilla. Eso ya es cosa del pasado. "Aunque no me gusta comprar a granel, ahora busco otras opciones que sean más económicas, pero que también sean de calidad", resalta.
Los tres ciudadanos consultados señalan que la coyuntura económica del país, que disparó los precios de los alimentos en el primer trimestre del año en el 3,55%, influyó a la hora de hacer el mercado.
Gloria Patricia Arias Pimienta, directora de Fenalco en Caldas, señala que esa es la tendencia que marca la pauta en la actualidad. Según ella, esto se da más en productos de aseo y detergentes. "En este momento hay demasiada oferta, lo que facilita encontrar calidad y economía", añade.
Sostiene que tradicionalmente era normal hacer el mercado pensando en las marcas que más nombre tenían, pero ahora la gama de productos es diversa y manejan precios bajos. "Lo que tendrán que hacer las marcas es replantear los componentes de sus productos para poder competir en precio. Buscamos que el dinero rinda", resalta.
¿Qué hacer?
Pese a esto, la consultora Kantar Worldpanel resalta que aunque la inflación acumulada en el 2015 terminó en 6,77%, los hogares tienen un espacio para adquirir marcas que complazcan sus necesidades.
Andrés Simon insiste en que muchos hogares adquieren marcas que generan beneficios y cumplen con la promesa de venta. "Es una alerta para que las empresas inicien acciones inmediatas en sus comunicaciones y planes de marketing, buscando adaptarse a las nuevas necesidades del consumidor", señala.
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