Licorera de Caldas, la menos afectada en el país

TATIANA GUERRERO

LA PATRIA | MANIZALES

La buena racha que presentaba la Industria Licorera de Caldas (ILC) en los últimos cuatro años se vio entorpecida por la emergencia sanitaria que vive el país.

El año pasado, la Industria registró un aumento del 15% en sus ventas, comparado con el 2018. Pasó de vender $221 mil 895 millones a $255 mil millones al cierre del 2019.

Según el gerente de la ILC, Luis Roberto Rivas Montoya, los resultados de este año son inciertos. Lo único claro es que la destilera fue la que salió mejor librada entre todas las licoreras colombianas.

En los primeros cuatro meses del año, el país registró unas ventas de 5 millones 265 mil de unidades. De estas, la compañía caldense vendió 2 millones 300 mil botellas de 750 mililitros, lo que significó una caída del 22%, comparada con el mismo periodo del 2019, cuando comercializó 3 millones 190 mil.

Antioquia presentó una reducción del 42%; Valle del Cauca, 60%; y Cundinamarca, 67%.

“Todo venía normal hasta marzo, cuando empezó la pandemia. En abril se dio una disminución considerable en las ventas, pero en mayo la situación mejoró”, dijo el gerente

Diversifican

La empresa ha tratado de compensar con las ventas de alcohol antiséptico. Se han vendido más o menos 2 millones de unidades en el país, que significan $8 mil 300 millones.

Aunque aún no se cuenta con las cifras de mayo, Rivas afirmó que el panorama del mes pasado mejoró porque la compañía replanteó las estrategias de mercadeo y se volcó a otros canales de distribución, como los sistemas de domicilio de Carulla, Rappi y del Éxito. Además, de la atención directa de los distribuidores.

“Se nota un cambio, en la medida que las entregas y las plataformas digitales empezaron a funcionar y los clientes también comenzaron a usarlas. Esto va a ser una gran transformación”, expresó.

La respetan

Frente a la medida de Ley Seca, que tomaron algunos alcaldes de Caldas, el gerente advirtió que la prohibición puede convertirse en un arma de doble filo, porque da vía libre a los adulteradores, contrabandistas y especuladores del trago.

Agregó que la medida representa una caída en las rentas del departamento, porque el 65% del precio de venta al público de una botella de licor es el impuesto al consumo, recursos que van a financiar la salud y educación de la región.

“Esas decisiones tienen más efectos negativos, pues estimulan la ilegalidad. No obstante, las respetamos y seguimos vendiendo, pues el impacto de esta ley no es tan profundo”.

El secretario de Hacienda de Caldas, Jaime Alberto Valencia Ramos, también consideró que la restricción genera un impacto negativo en las transferencias anuales que destina la Licorera a la Gobernación. “La situación es paradójica, considerando que el sector de la salud es el que más requiere recursos en estos momentos”.

Es muy temprano

Rivas dijo que de los $35 mil millones en transferencias proyectadas para este año (ver histórico), se han entregado $14 mil millones, debido a que estas estaban decretadas desde el año pasado. La entrega de estos ingresos se darán hasta octubre.

Con respecto a los recursos del 2021, el secretario de Hacienda aseguró que se van a reducir las transferencias por la baja en el consumo.

El gerente añadió que aún es prematuro conocer cuáles serán los efectos de la emergencia en estos rubros porque se desconoce cómo será el comportamiento de las ventas en el segundo semestre, debido a que es posible que los bares, discotecas, conciertos, fiestas y otros eventos continúen paralizados.

“No sabemos qué va a pasar, eso sería tener una bola de cristal en un momento de incertidumbre. Se va a monitorear cada día y semana para tomar decisiones”.

El secreto

El gerente de la Licorera de Caldas, Luis Roberto Rivas, reveló algunas de las fórmulas que se han implementado para afrontar la crisis:

*Se ha diversificado en los productos, con la creación de una línea de producción de alcohol antiséptico y glicerinado.

*Cambios en las políticas de mercadeo. Se centraron los esfuerzos en otros canales, que supuso la comercialización a través de supermercados de cadenas, grandes tiendas, domicilios, plataformas digitales y comercio electrónico.

*La compañía ha permanecido en contacto con sus clientes a través de seminarios, catas, conciertos virtuales y concursos.

Fue menor

De los 31 departamentos a los que llegan los productos de la Industria de la Licorera de Caldas, en Santander, Valle del Cauca y algunas zonas de Caldas se presentó una disminución del consumo de alcohol, aseguró el gerente Comercial, Mauricio Vélez.