Adriana Osorio
LA PATRIA|MANIZALES
La producción de café en el país sigue dando muestras de recuperación. Por lo menos así lo ven los directivos del Comité de Cafeteros de Caldas ante la disminución del 39,1% en las importaciones de grano entre enero y abril pasados.
Según reportes del Departamento Administrativo Nacional de Estadísticas (DANE), durante los primeros cuatro meses las compras externas de café sumaron 63,8 millones de dólares frente a 104,7 millones dólares en el mismo lapso del 2012. En volúmenes, la disminución fue cercana a los 200 mil sacos de café importados.
Eugenio Vélez Uribe, miembro principal por Caldas en el Comité Nacional de Cafeteros, dice que el resultado es positivo, pues muestra que la producción mejoró. Sin embargo, explica que aunque muchos críticos aseguran que las compras externas afectan a los productores nacionales, cabe recordar que son necesarias, porque casi el total del grano producido en Colombia se exporta y no alcanza para el consumo interno.
"El consumo nuestro se abastece de trillas, de los subproductos, pues si se quiere consumir el mismo café que exportamos tendríamos que pagar precios más altos. Importar es una necesidad y no creo que afecte a los productores, pero sí muestra mejor producción", señala Vélez Uribe.
El presidente del Comité Departamental, Marcelo Salazar, resalta que las importaciones de café a Colombia de otros orígenes arábigos han sido legales y no afectan a los productores de café, además de que son necesarias para abastecer el consumo interno que está entre un millón 200 y un millón 500 de sacos al año.
"Lo ideal sería que la producción alcanzara para exportar lo necesario y para el consumo del país, pero recordemos también que la producción colombiana genera entre el 3% y 5% de pasillas, que no alcanzan a suplir la necesidad del consumo interno arábigo. Es importante aclarar que las importaciones legales solo son de arábigo, no de café robusta", indica Salazar.
La disminución en las importaciones se complementa con los incrementos en la producción y las exportaciones del grano, de 35% y 28%, respectivamente, según registros de la Federación Nacional de Cafeteros en el primer semestre.
De esta manera, la producción pasó de 3,6 millones de sacos en el periodo enero-junio del año pasado a 4,9 millones de sacos en el mismo lapso de este año. Además, las ventas externas del primer semestre aumentaron de 3,4 a 4,3 millones de sacos de 60 kilos.
913 mil sacos cosecharon los caficultores colombianos en junio, 28% más frente a junio del año pasado.
Eugenio Vélez Uribe, miembro principal por Caldas al Comité Nacional de Cafeteros, dice que el Gobierno sí está cumpliendo con el apoyo pactado para el gremio, pues las ayudas del programa de Protección del Ingreso Cafetero (PIC) están llegando a los productores, aunque no se entregan en el momento de la venta, pues son necesarios controles y la Superintendencia no lo permite, al no haber una libre competencia para la entrega.
"La única preparada para esto es la institucionalidad cafetera, pues los distribuidores privados no quieren participar, por lo que solo lo entregan las cooperativas. Además de esto se necesita una revisión para la entrega, con el fin de evitar fraudes, y que realmente las ayudas lleguen a los caficultores", explica Vélez Uribe.
Dice que el ministro de Hacienda, Mauricio Santamaría, les aseguró continuidad en el apoyo al sector, pero para determinar qué mecanismos se utilizarán es necesario esperar el comportamiento de las variables económicas en el segundo semestre: el precio externo, la tasa de cambio y la producción.
Un nuevo llamado a la prevención en los cafetales de Manizales, Chinchiná, Palestina y Neira hace el Comité Departamental de Cafeteros ante el regreso de altas temperaturas, que benefician la dispersión de la plaga.
Los períodos secos prolongados, las temperaturas más altas y eventualmente el polvo o la caída de ceniza volcánica, como la emisión del pasado 27 de mayo, pueden también favorecer la dinámica poblacional de la arañita.
Marcelo Salazar, presidente del Comité, explica que la alerta se enfoca sobre todo en Manizales y Chinchiná y les recuerda a los caficultores que ante cualquier duda o problema pueden acudir al servicio de extensión de la entidad.
La Junta Directiva del Comité de Cafeteros de Caldas reeligió, por ocho meses más, al presidente del Comité, Marcelo Salazar, y eligió como nuevo vicepresidente a Virgilio Clavijo López, por la circunscripción de Manizales y Neira.
Salazar dijo que la reelección es un compromiso más con los cafeteros de Caldas, un reconocimiento que les hace la junta, y resaltó que se necesita un trabajo a fondo frente a la crisis actual del sector, que la considera las más difícil de la caficultura en toda la historia y que está llevando a que los productores den un grito desesperado, pues a pesar de las ayudas no se cubren costos de producción. "La idea es seguirnos sentando para buscar alternativas en cuanto a proyectos de financiación".
Salazar Velásquez llega a su segundo período consecutivo al frente de la junta del Comité. Es administrador agropecuario y administrador de Negocios. En el 2006 ingresó al Comité Departamental y fue reelegido en las elecciones cafeteras del 2010.
Por su parte, Virgilio Clavijo López asume la Vicepresidencia del Comité por primera vez en la actual Junta Directiva, elegida para el período 2010 – 2014. Es actualmente caficultor en Manizales, presidió durante 12 años el Comité Municipal de Cafeteros de Samaná y desde hace 15 años hace parte del Comité de Cafeteros de Caldas, en donde ha sido presidente en varias oportunidades.
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