JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
Aburridos salieron ayer varios asistentes del hotel Termales el Otoño, después del foro organizado por el Congreso de la República, bajo el nombre "Viva Caldas, espléndida comarca".
Aunque el expresidente del Comité Intergremial de Caldas (CIC) Gilberto Saffón Arango llegó ilusionado al encuentro, ante la expectativa de que estarían los ministros de Hacienda y de Transporte y que esta vez sí habría resultados para Aerocafé, finalmente mostró su desazón.
Esta se debe a que fue promotor de la encerrona que le hicieron los gremios al presidente Santos en octubre del 2013, en el mismo Termales el Otoño, cuando el presidente se comprometió con $50 mil millones para la vigencia del 2014. Los recursos nunca llegaron.
"Este Gobierno ha invertido unos $2,8 billones en aeropuertos nacionales, y nosotros, con el mismo Gobierno, no hemos podido conseguir los recursos, lo que nos deja muy preocupados", resaltó.
La llamada que no llegó
Hacia las 10:00 a.m. se anunció que el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, no podía asistir por problemas para aterrizar en el aeropuerto La Nubia, hecho que generó risas, justo en un evento que quiso demostrar la necesidad de una nueva terminal.
El presidente del Congreso, Mauricio Lizcano, del Partido de La U, resaltó que Cárdenas hablaría más tarde vía telefónica, lo que mantuvo la expectativa de los cerca de 400 asistentes al evento que esperaron hasta las 12:50 p.m. A esa hora terminó el encuentro. La gente se fue y la llamada salvadora nunca llegó.
El sinsabor
Saffón no fue el único aburrido. El presidente de Camacol Caldas, Felipe Calderón, celebró el encuentro, pero lamentó que no hubiera una respuesta concreta. Hizo un llamado para preservar esa unión alrededor de la terminal: "Que no quede dudas de que el Aeropuerto es una necesidad, y urgente, así haya voces discordante por ahí".
La gerente de Aerocafé, Amparo Sánchez, también salió insatisfecha. Resaltó que en las mesas de trabajo, la propuesta de la entidad apunta a que el Gobierno nacional aporte por lo menos unos $270 mil millones, el Departamento y el Municipio unos $115 mil millones, y a través de una Alianza Público Privada (APP) se construya la infraestructura de tierra y se opere y se mantenga.
"Lo más importante del evento es que se da claridad, ante tanta desinformación que ha tenido el proyecto. Hay que dejar la página de lo que ocurrió en el pasado y montarnos en el bus de que Caldas y el Eje Cafetero necesitan el aeropuerto y que articule el espacio aéreo colombiano".
Propuestas salvadoras
En el encuentro apareció incluso un salvador. Leonardo Alzate López, representante de la dirección operativa de la firma mexicana Fibercell International, planteó que pueden asumir el proyecto, logrando una estabilización de los terrenos y construir una pista de hasta 4 mil metros.
Aseguró que pueden invertir unos 615 millones de dólares, cerca de $1,8 billones, incluyendo el aeropuerto y una inversión adicional en la siembra de productos agrícolas, como la maralfalfa, pasto de corte y la generación de biodiésel.
Ante el escepticismo del público, aseguró que la inversión no son los pasajeros, sino el movimiento de carga regional y por eso están decididos a apostarle a la terminal.
También hubo propuestas reaccionarias. "Ustedes no tienen cómo defender a su presidente. Santos no ha hecho sino burlarse de los caldenses estos siete años... Este Gobierno vino a pasearse y darse toda la publicidad, después de la tragedia del 19 de abril", le dijo el senador Carlos Felipe Mejía, del partido Centro Democrático, al senador Lizcano.
De allí su propuesta de hacer un gran paro regional. Consideró que es la única forma en que el Gobierno responde, tal y como lo logró Buenaventura. "No responde si no a los paros, o qué hizo Fecode", preguntó.
El debate político
El resto del evento se fue en cuestionamientos y enfrentamientos políticos. Mauricio Lizcano lamentó la ausencia del ministro de Transporte, el exalcalde Jorge Eduardo Rojas, y que le haya llevado recursos a muchos aeropuertos, menos al de Caldas. "Esperemos que después del 20 de julio, cuando termine mi presidencia, él pueda anunciar estos recursos que hemos trabajado con el ministro de Hacienda", resaltó.
También criticó al exgobernador encargado, Ricardo Gómez, porque él habría dicho puntualmente que no iba a aportar un solo peso para la terminal, aunque posteriormente en un comunicado reclamó el compromiso del Gobierno nacional.
Para los asistentes, la mejor noticia fue el compromiso de gremios y dirigentes, que pidieron la palabra para insistir en la necesidad de estar más unidos para sacar adelante este proyecto.
También se resaltó el compromiso del gobernador de Caldas, Guido Echeverri Piedrahíta, para aportar hasta $50 mil millones, e incluso un poco más, bien sea con recursos de crédito, el dinero de la venta de las acciones de Isagén o propios.
El alcalde de Manizales, José Octavio Cardona, no se quedó atrás: "El aeropuerto ya no es un querer, sino una necesidad. Por esta razón la manifestación pública de una alianza con la Gobernación de Caldas para que los entes territoriales seamos los que respaldemos el proyecto, después de los recursos nacionales".
A la gerente de Aerocafé le preocupa que este Gobierno ya tiene el sol a sus espaldas, motivo por el cual se tiene corto tiempo para estructurar las vigencias futuras, antes de la Ley de garantías que se inicia en noviembre próximo.
Lizcano se mantuvo en que citará un debate de control político a los ministros de Hacienda y Transporte, para que respondan sobre Aerocafé. "Ya que el Mintransporte no quiere dar la cara voluntariamente, pues habrá que hacerlo mediante citación".
Rojás contará de los proyectos
En diálogo con LA PATRIA, el ministro de Transporte, Jorge Eduardo Rojas, aseguró que el mismo Lizcano organizó este foro en tres fechas distintas. "Estuve listos dos veces para asistir al foro, pero en esta tercera él puso la fecha sin consultar, y yo tenía un evento importante como es el OCAD Caribe, del que soy miembro, pero además el 85% de los proyectos que acaba de aprobar son del sector transporte y por lo tanto era mi obligación asistir", justificó.
También tenía que estar en la Junta Directiva de Cormagdalena, por lo que responsabilizó a Lizcano de organizar mal los eventos y después querer hacerlo quedar mal.
"Seré yo el que vaya a contarle a Caldas y a la región cómo van los proyectos, no en un evento que tiene un tinte político. Yo que soy de la región sí lo conozco, no debería hablar de esta manera, pero tampoco voy a soportar que me trate de la forma que lo ha hecho", insistió.
Rojas sostuvo que se sigue trabajando en el cierre financiero con vigencias futuras, y que también hay un respaldo en la red nacional vial de Caldas y que vendrán recursos nuevos para los proyectos locales. "El apoyo sigue siendo irrestricto y fuerte. Me parece que hay mala fe en las declaraciones del senador, dejémoslo que actúe políticamente, que yo lo haré profesionalmente", aseveró.
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