JUAN CARLOS LAYTON
LA PATRIA | MANIZALES
Hacia las 10:00 a.m. el gobernador de Caldas, Julián Gutiérrez Botero, anunció ayer en la rendición de cuentas de Inficaldas, que una hora más tarde saldría oficialmente un comunicado sobre la Industria Licorera de Caldas, luego de la renuncia del gerente Bruno Seidel Arango.
En ese momento anticipaba algo similar a lo que publicó LA PATRIA, con respecto a que lamentaba y respetaba su retiro, que agradecía su colaboración y se comenzaba la búsqueda de un sucesor.
No obstante, más allá de estas palabras, el boletín fue poco lo que aclaró frente a la situación de la destilería y el futuro inmediato para esta entidad, de nuevo huérfana de gerente.
Las declaraciones del Gobernador, con cierta molestia por lo que se le preguntaba, tampoco aclararon la situación de la antes llamada joya de la corona, y que el año pasado reportó pérdidas históricas por $4 mil 83 millones.
Adelantó que en medio de este proceso y de la entrega del cargo de Seidel Arango a partir del 1 de mayo, se estaban analizando las diferentes hojas de vida, "con la ayuda de todo el mundo, y la linterna de Diógenes".
También insistió en que la próxima semana estará en la ciudad el exgobernador de Caldas Pablo Muñoz, con el fin de contar con su asesoría sobre las diferentes alternativas para la ILC, dentro del plan de "superchoque" que anunció la semana antepasada.
Pese a ello, aparte de reconocer que este se volvió una preocupación de 24 horas y siete días a la semana, se abstuvo de opinar sobre la situación que tiene en estas condiciones a la empresa y las posibilidades de buscar un socio estratégico o un socio comercial. "Ese tema ya está liquidado, con el comunicado que le mandé a la prensa... Cambiemos de tema, por favor", solicitó.
Falta de políticas
Para varios dirigentes, esto evidencia la falta de claridad que se tiene para retomar las riendas de la destilería, ante los actuales problemas, tanto coyunturales como estructurales.
Para el diputado Jorge Luis Ramírez, conservador sierrista, no solo es lamentable la renuncia del gerente, justo en el momento más crítico de la ILC en toda su historia, sino que evidencia un Gobierno departamental frágil. "Un gobierno que no ha sido capaz de convocar todas las fuerzas vivas del departamento. No hay un apoyo directo frente a la reestructuración y hay un problema de gobernanza frente a las decisiones y muchas cosas están manga por hombro", aseguró.
Tal y como se ventiló en la Asamblea, para varios corporados la tarea tiene que enfocarse a un "revolcón", que incluya una reestructuración completa, desde la parte laboral.
"No se necesita un mago, sino alguien con carácter para modificar el fondo de publicidad, conseguir un distribuidor internacional de ron y que se atreva a reestructurar el aspecto laboral de la empresa".
No obstante, Ramírez también cuestionó a Seidel Arango, al considerar que pudo dar una pelea más combativa. "Estaba acostumbrado a unos puestos públicos más serenos, más tranquilos y sin tanto movimiento como la turbulencia que tiene la silla de la ILC", insistió.
La posición la acompañó Édgar Augusto Corrales, conservador yepista, al sostener que aunque son muchos los problemas, es hora de tomar decisiones fuertes en aspectos como el fondo de publicidad. "Yo le dije que si lograba modificar esto, le haría una estatua, porque es un gran problema".
Participación privada
Para la diputada Paula Marcela Osorio, del Mira, el revolcón debe incluir la búsqueda de caminos hacia la privatización, un socio estratégico o incluso pensar en un proceso de concesión.
Un concepto contrario tiene Jorge Hernán Aguirre, del partido Liberal, quien duda que siempre se tenga que privatizar todo. Pese a ello, respaldó la necesidad de pensar en cambios extremos para salvar la empresa, así se incluya la participación de un privado.
Le pidió al gobernador nombrar a un gerente firme, que no llegue a improvisar o a estar cinco o siete meses como máximo, pues en su concepto "la renuncia de Seidel Arango fue imprudente, desacertada e infortunada, pues no solo generó ilusiones, sino que dejó tirada la entidad".
Para los gremios, más que cuestionar la renuncia del gerente, lo principal es sacar la empresa adelante. "No podemos dejar que un patrimonio de los caldenses desaparezca ante los ojos de todos. Fue un líder importante, pero no creo que sea el único", dijo Lina María Ramírez, presidente ejecutiva de la Cámara de Comercio. "Me niego a creer que no haya nada para hacer, aunque por supuesto habrá decisiones que duelan", indicó.
Sin embargo, las críticas seguían lloviendo. Para Jorge Eliécer Laverde, liberal "no es una noticia nueva la renuncia, muchos sabían que se presentó para un cargo en Bogotá, para mejorar su nivel de ingresos. Eso sí, nos deja estrategias claras para seguir", aclaró.
Opiniones
* Lina María Ramírez, presidenta ejecutiva de la Cámara de Comercio: Es lamentable que el doctor Bruno se vaya de la ILC, nuestro compromiso es seguir adelante.
* Catalina Rey, directora Comité Intergremial: lamentamos su renuncia, pero hay que seguir, no es el fin. Él hizo un trabajo muy importante y con esa información hay que seguir adelante.
* Irene Mejía, gerente Andi: Lamentamos su renuncia. Sin embargo, pienso que tenemos que unir todos los esfuerzos para sacar adelante la empresa. Eso es lo más importante en este momento.
* Gloria Patricia Arias, directora Fenalco: Deja un terreno totalmente abonado con estrategias y acciones claras que permitirán, seguramente, tomar las mejores decisiones frente a la ILC.
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