Aumento de broca, otro problema del sector cafetero

JUAN CARLOS LAYTON

LA PATRIA | MANIZALES

Un nuevo problema brota en la caficultura regional. A la par con la regular producción y los precios, que siguen cayendo, ahora el sector en Caldas enfrenta problemas de calidad.

La queja se volvió generalizada entre productores, comercializadores y hasta las cooperativas de caficultores de la región, que resaltan las dificultades ante la fuerte presencia de la broca, con infestaciones que superan el 15 % y el 20 % en varias zonas del departamento, en especial en la zona central y el bajo occidente.

El reporte de algunos productores es que incluso en unas regiones es superior, por cuestión de las altas temperaturas en los primeros meses del año, las dificultades para abonar y hasta al abandono en que se dejaron algunos cultivos, mientras se atendía el llamado del paro cafetero nacional.

El problema lo ratifica Andrés Castañeda Piedrahíta, comercializador particular de café, quien resaltó la disminución en las compras, en cerca del 70 %.

"Ahora el café está saliendo con muy mala calidad, hecho que hace que un grano que hoy se paga en $ 50 mil (sin auxilio), cuando lo entregan termina en unos $ 40 mil por arroba", explicó.

Explica que esto solo ha beneficiado a algunas torrefactoras multinacionales, que están llenas de pasillas y cafés de mala calidad, que quedan para el consumo nacional.

Cosecha de mitaca

De acuerdo con Octavio Jaramillo, caficultor de La Cabaña, el problema es que los indicadores de broca han superado incluso los niveles del 30 %, por lo que en ocasiones las rebajas en los pagos, por brocas y pasillas, superan los $ 6 mil y $10 mil.

Para algunos cultivadores la gran ventaja es que comenzó la cosecha de mitaca o de mitad de año desde finales de la semana pasada y se podría prolongar hasta finales de abril o principios de mayo.

Pese a ello, aunque este graneo será mejor que el de los últimos cinco años, según el presidente del Comité de Cafeteros, Marcelo Salazar, la zozobra se mantiene, pues no se trata de una gran producción. Por esta razón, coinciden en que la gran expectativa se mantiene en la cosecha de fin de año, para la cual sí se contemplaron unas mejores florescencias, explicó.

Consulta del precio

Aunque en la Cooperativa de Caficultores de Manizales se destaca que hay un mayor número de productores preguntando por la nueva ayuda que se ubicó en $ 14 mil 500 por arroba, desde el viernes pasado, aún muchos no han podido llevar a vender una buena cosecha.

Los que lo han hecho también tienen reclamos. Teresa Gallo, caficultora de Pácora, resalta que aunque esperaban que el incentivo se los entregaran directamente, les dijeron que la consignación se las harán a través de su cédula cafetera en unos 20 días. Esto, además de la reiteración de que cada finca solo tiene derecho a un cupo y no por todo el café que tenga para vender.

El problema para otros cultivadores es que el precio del café volvió a descender por debajo de los $ 500 mil. Hoy amaneció en $ 498 mil 125, es decir, $ 3 mil 625 menos que el fin de semana, con lo que se comienza a perder el punto de equilibrio para tener un precio que alcance siquiera por los costos de producción.

La expectativa del sector es que las cosas mejoren y que las promesas del Gobierno de un mayor control a la revaluación del peso se comiencen a dar. "Lo único que debemos tener es esperanza, porque dígame usted qué más podemos hacer. ¿Cambiarnos a qué?", pregunta Octavio Jaramillo.

La cifra

$ 14 mil 500 por arroba, la ayuda que aprobó el Gobierno desde el pasado 7 de marzo, y que se comenzó a aplicar desde el pasado 15 de marzo.

La frase

"Por ahora hay que escoger entre todos estos males el menos peor y celebrar las ayudas que nos ofreció el Gobierno, así sea para acercarnos a los costos de producción".

Octavio Jaramillo, caficultor de La Cabaña

Antioquia también le quita el respaldo a gerente de Federacafé

Antioquia, el hoy segundo mayor productor del país después del Huila, también le quitó el respaldo al gerente de la Federación de Cafeteros, Luis Genaro Muñoz.

El pronunciamiento se genera después de que Caldas, al unísono, con sus 24 comités, le retiró su respaldo, en una carta enviada la semana pasada al Comité Directivo, y en la que le reclaman su falta de liderazgo e incapacidad de interlocución, y su mayor afinidad con el Gobierno.

En esta ocasión es el Comité Departamental de Antioquia que lo sostiene en un comunicado general.

Dice: "luego de adelantar un análisis detallado y sereno del entorno gremial cafetero y después de escuchar la voz de muchos de los caficultores de este departamento, decide que lo más indicado es retirarle el apoyo al Gerente General de la Federación Nacional de Cafeteros, doctor Luis Genaro Muñoz Ortega, ya que se concluyó que hoy no representa los intereses de los caficultores".

Actitud negligente

Con este anuncio, la Federacafé pierde dos grandes apoyos, considerando que las dos regiones representan casi el 18 % de la producción nacional, y el 25,62 % de participación cafetera en el país.

En la carta de Caldas se resalta que el Gobierno nunca dimensionó la verdadera profundidad de la crisis y que la omisión del gerente en demostrarla llevó a fraguar la situación.

"El presidente de la República y sus ministros, de corazón cafetero, antepusieron sus pretensiones políticas a la tesis concluyente de que lo que es bueno para el café es bueno para Colombia".

Se sumó la carta de los comités de cafeteros de Chinchiná, Manizales y Palestina, enviada el pasado 9 de marzo al gerente y en la que le indican que "...hemos tomado la decisión de manifestarle que su actitud negligente, pusilánime y, a nuestro entender, ajena a las reales necesidades de los caficultores, nos obliga por dignidad a solicitarle su renuncia inmediata".

También le sostienen que en ningún momento los representó y que más bien defendió la postura del Gobierno: "...y se negó a aceptar la crisis tan grave por la que estamos pasando, a pesar de que como comités municipales habíamos comunicado la situación, a través de las actas mensuales donde queda constancia de las necesidades que hemos tenido durante los últimos años".

Al finalizar la carta, los presidentes resaltan que como comités estuvieron presentes y apoyaron las protestas del paro, y que se comprobó que los conductos institucionales regulares y pacíficos no funcionan, ante su falta de carácter, vehemencia y fuerza gremial.