El interés en el Plan de Retiro Voluntario (PVR) que propuso la Licorera de Caldas comenzó a aumentar. Después del acuerdo al que se llegó el mes pasado, y que benefició a 54 personas, de las 84 con que se estaba negociando, unas 27 más anunciaron su interés de acogerse a un Plan de retiro similar.
Así lo confirmó ayer en LA PATRIA Radio el gerente de la destilería, Jorge Iván Orozco Hoyos, al resaltar que de las 24 personas que estaban pendientes, seis anunciaron esa intención, más 21 que no estaban en el Plan de retiro, pero pidieron que les hicieran una oferta. Bajo estas condiciones, Orozco Hoyos planteó que primero habrá que tomarse los 60 días, dentro del proceso de retiro gradual con las 54 personas que se negoció, de tal forma que salida de este personal no afecte la empresa. Para ese primer grupo, el costo del retiro se estimó en $19 mil 57 millones, recursos que hoy se están solicitando ante la banca.
Sobre el particular, el gerente aseguró que hay tres entidades financieras con las que se está definiendo ese préstamo, ya preaprobado. Para Orozco Hoyos, el acuerdo es positivo, pues esto le comenzará a dar un respiro a la empresa. A eso se suma el acuerdo con respecto a que la restitución de personal solo será del 40%. Es decir, del total de quienes salieron, solo se podría recomponer la planta con unas 20 personas.
También insistió que por ahora se mantendrá cerrada la planta de destinación, motivo por el cual se siguen haciendo las pruebas para comprar el alcohol tafia y producir ron. Ese licor de prueba se está comprando en Bolivia y Panamá, pero aún no se define cuál será el proveedor oficial.
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