MIGUEL ORLANDO ALGUERO
NEGOCIOS | LA PATRIA
$1.500 millones son las estimaciones de pérdidas por la suspensión de operaciones del aeropuerto La Nubia por la pandemia, según Inficaldas. En esta cifra también entran los 13 locales comerciales. A la fecha reabrieron cinco.
Estos comerciantes cerraron sus negocios durante seis meses y medio, por lo que aseguran que pasaron por las verdes y las maduras ante la falta de ventas y visitas de pasajeros.
Hubo ayudas. Inficaldas y la Gerencia del aeropuerto congelaron los contratos de arrendamiento, pero a pesar de ese respaldo, dejaron de tener alguna ganancia y muchos de sus productos comestibles se vencieron.
Infi espera que con la reactivación de vuelos comerciales desde y hasta Bogotá y Medellín, que empezaron el 23 de septiembre, se alcancen registros de 2 mil pasajeros al mes, y se dinamice la economía de la terminal aérea. Antes de la pandemia se movían 11 mil pasajeros por mes.
Impacto
Juan Sebastián Arango, secretario General de Inficaldas, sostuvo que el compromiso de Infi y de la Administración de La Nubia es apoyar a estos comerciantes para darles facilidades económicas. “Aliviar el cobro de los cánones de arrendamiento y, a medida que los mismos comerciantes cuenten con los protocolos aprobados y estén en condiciones de reiniciar sus actividades, el aeropuerto seguirá apoyándolos”.
Por la reapertura del aeropuerto se benefician alrededor de 100 familias y se generan cerca de 60 empleos directos entre trabajadores de operadores aéreos, aerolínea, comerciantes, personal administrativo, bomberos, guardas de seguridad y policías, así lo indicó Juan Manuel Londoño, gerente de Inficaldas.
Contrato
Julián López Ramírez, administrador de La Nubia, explicó que la relación contractual es directamente entre el arrendatario y el arrendador, que es el gerente General de Inficaldas como representante legal.
“El contrato es por un año y en ese lapso se renueva. La forma de cobro es por el valor del área ocupada y cada locatario lo adecua según sus necesidades y condiciones, entonces sobre ese total del área se estipula el precio y luego se divide por los doce meses”, aseguró.
El administrador recordó que desde el 22 de marzo se les suspendió el contrato y mes a mes se fue ampliando hasta completar seis meses porque las operaciones iniciaron el 23 de septiembre. “No se les cobró ningún peso y se les respetaron sus espacios. Incluso se llegó a un consenso se cobrarles a quienes abran el 50% del canon hasta el 31 de diciembre. Esto es una estrategia y gestión de la Administración, Infi y Gobernación para apoyar a los empresarios”.
NEGOCIOS habló con tres comerciantes que tienen sus locales en La Nubia sobre cómo vivieron estos meses de cese de actividades y qué percepciones tienen sobre la reapertura de la terminal aérea.
Fotos | Freddy Arango | LA PATRIA
María Eugenia Londoño, de Delicias La Nubia: Fue duro sobrevivir durante estos meses, sin embargo, tuvimos el apoyo de Inficaldas y Del administrador del aeropuerto, quienes no nos cobraron arriendo. Nos preocupa que no entró ni un peso por ventas. Lo que acordamos fue que quienes abran empiecen a pagar desde octubre hasta diciembre, pero la mitad del canon. Como esto seguirá duro podremos pagar ese 50% restante. Es algo que alivia. Ahora nos toca venir, trabajar y que los clientes Compren. Acá ofrezco productos de La Suiza, de Café Quindío, chocolates rellenos de arequipe o de licor, y otros dulces.
Luz Adriana Duque, del local Aruba: El cierre fue complicado, los productos se nos vencieron, pero Inficaldas desde el primer día de la cuarentena nos congeló los arriendos, eso permitió que no se golpeara tanto el bolsillo. Para abrir nos tocó presentar la documentación de los protocolos a Inficaldas, ellos los revisaron. Debemos tener alcohol, desinfectar las cosas, lavarnos las manos cada hora y tener todo súper aseado. Vemos esta reactivación difícil, la gente pasa derecho, creo que por temor al contagio. Esperar que nos vaya bien con las ventas de cafés de exportación, dulces típicos del Eje y artesanías.
Ana María Valencia, de Tienda Artesanal: La situación fue difícil. Fue duro estar cerrados. Llega la esperanza con la apertura, así sean pocos vuelos, pero la idea es iniciar. Inficaldas se manejó bien con nosotros, el no pagar arriendo fue una ayuda importante. Para sostenerme estos meses vendí junto con mis hijas cajas sorpresas, desayunos y anchetas. Para abrir, hace un mes, enviamos unas cartas con los protocolos. Nos tocó empezar de cero. Tenemos artesanías, pero muchos productos de dulcerías se vencieron y no tuvimos la posibilidad de cambiarlos. Ya iniciamos con dos vuelos, ahora esperar que sean más y que esto mejore.
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