Katerine Vargas
MANIZALES | LA PATRIA
Wber Ortiz ha dedicado 35 de sus 45 años de vida a cultivar papa. Este tubérculo fue el sustento de su familia paterna y ahora él se dedica a labrar la tierra para "llevar la papita" a su hogar, donde convive con su esposa, tres hijos y una nieta.
Cada día desde las 5:30 de la mañana, Wber trabaja en las cerca de 25 hectáreas que tiene sembradas (400 bultos), en la finca El Arbolito de la vereda Laguna Negra, vía al Nevado del Ruiz.
En este momento su cultivo está en etapa de cosecha, por lo que él y las 15 personas que trabajan allí esperan una buena producción. De los 400 bultos sembrados, se estima que se recolectarán entre 8 mil y 9 mil bultos.
Generalmente, Wber vende su producción a los propietarios de los distintos depósitos de papa que hay en Manizales, principalmente a los que se encuentran en la plaza de mercado de la ciudad.
Rendimiento
José Darío Pineda es otro agricultor, de 63 años de edad. Más de la mitad de su vida ha cultivado papa en la zona del páramo de Letras, en los límites entre Tolima y Caldas.
Este agricultor tiene sembradas 145 cargas de papa (más o menos 300 bultos), a las que le invierte $150 millones para semillas, fertilizantes, fumigaciones de control fitosanitario y para el pago de la mano de obra.
Desde que se siembra la papa, se tarda unos 8 o 9 meses en estar lista la producción, tiempo durante el cual el cultivo requiere atención y cuidados para su correcto crecimiento.
Al final de la cosecha don Darío espera obtener entre 5 mil o 6 mil bultos, que por esta época se vende cada uno a $110 mil.
Sin embargo, el agricultor explica que aunque él siembra papa parda pastusa, de la producción resultan tres tipos de papa: gruesa, pareja y redrojo.
La que se vende a mejor precio es la gruesa (grande). La pareja (mediana) puede llegar a ofrecerse hasta a $73 mil y el redrojo (pequeña) a $24 mil el bulto.
Don Darío comenta que fuera de las utilidades, el negocio de la papa deja ganancias por mitad, por lo que no piensa dejar este negocio.
Según los cultivadores, el alza en el precio en la papa se debió a que durante este primer semestre del año los efectos del fenómeno de El Niño y las fuerte heladas en algunas zonas del país generaron pérdidas en el sector papero, por lo tanto la producción disminuyó.
Aunque en la zona del páramo de Letras no se vieron afectados, la regulación en los precios nacionales hizo que en todo el país el costo aumentara.
En crecimiento
De acuerdo con datos registrados en la Secretaría de Agricultura de Caldas, en el departamento hay sembradas 617 hectáreas de este cultivo en Aguadas, Manizales, Marulanda, Neira, Pensilvania, Salamina y Villamaría.
En el 2003 el departamento contaba con mayor producción del tubérculo, pues solo en el corregimiento San Félix (Salamina) había cerca de 300 hectáreas de papa, que fueron disminuyendo por cuestiones climáticas que afectaron las producciones y el desánimo de los mismos productores. Hoy solo se tienen unas 80 hectáreas. Esto llevó a que los agricultores buscaran nuevas alternativas de negocio.
Hace unos cuatro años la organización Yunus Negocios Sociales, en esa época llamada Grameen Bank, habló de impulsar la industrialización de papa en Caldas, con una posible alianza entre la empresa de papas McCain y los productores de la región, como una oportunidad para disminuir las brechas de pobreza.
Sin embargo, esta idea se quedó únicamente en palabras, pues según el secretario de agricultura, Ángelo Quintero Palacio, el proyecto no fue más allá.
Impulso
Hoy la situación es diferente. De acuerdo con la Secretaría de Agricultura, en los últimos dos años el cultivo ha aumentado en un 30%, y está catalogado entre los productos más importantes en la región, generando cerca de 20 mil empleos. En temporada de cosecha una hectárea de papa requiere entre 20 y hasta 40 trabajadores por día.
Desde la Secretaría de Agricultura de Caldas, actualmente se trabajan dos proyectos. Uno es incluir la papa dentro de los productos marca Origen Caldas, con el fin de fortalecer sucomercialización y promoción en distintas presentaciones en las grandes cadenas.
Sin embargo, por el momento se encuentra frenado el proyecto por efectos del fenómeno de El Niño.
Por otro lado, se trabaja para sacar adelante un convenio con la Federación de Paperos de Colombia (Fedepapa), para mejorar la producción en la región, a partir del uso de semillas certificadas.
De acuerdo con la Secretaría de Agricultura, el objetivo es impulsar este cultivo en la región, promoviendo la asociatividad entre las organizaciones de base y los pequeños productores de papa, pues una dificultad que se ha identificado es la falta de organización entre el gremio.
La meta es llegar a la soberanía alimentaria de la papa y no depender de Nariño, Boyacá o Cundinamarca.
El proyecto es más ambicioso, pues incluso se espera duplicar el área sembrada en papa en Caldas y llegar siquiera a las 1.500 hectáreas.
Todos estos proyectos hacen que Wber y José Darío tengan más interés en su trabajo, y aunque reconocen que es una labor que en ocasiones genera pérdidas, el hecho de que se piense fortalecer esta actividad en la región les hace pensar que su producto seguirá siendo el sustento de muchas de sus generaciones.
Procedimiento
Una clave para obtener una buena cosecha es rotar el cultivo de terreno cada año. Según Ricardo Cañón, trabajador en cultivos de papa de la zona del páramo de Letras, esto les sirve para dejar descansar la tierra y nutrirla para el cultivo.
Antes de empezar a sembrar hay que arar la tierra. Bien sea con tractor o con bueyes.
El segundo paso es sembrar las semillas por pares. Después viene el aporque, que se trata de cubrir la planta con tierra para que se ponga más fuerte. A los cuatro meses vienen las fumigaciones.
Según Wber Ortiz, el secreto para una buena producción es hacer los trabajos a tiempo.
Es importante, según el agricultor, que las semillas no tengan más de un mes de arrancadas cuando se vayan a sembrar.
El cultivo está listo cuando la flor de la planta empieza a caer y brotan unos frutos verdes. Se puede cortar la planta o esperar a que se caiga.
Enfermedades
Según los paperos consultados, la enfermedad que más ataca a la papa es la gota, que se da por los cambios bruscos en el clima. Lo que sucede es que la planta se quema y se pone de color oscuro. Esto hace que la producción se pierda. Se puede evitar cuando se fumiga en los tiempos indicados y con un buen asesoramiento para los químicos a aplicar.
Otras enfermedades son: el gusano blanco, broyero, trozador, tostón, y las heladas.
DATO:
En una hectárea se siembran entre 8 y 10 cargas de papa, unos 16 a 20 bultos, y la inversión es de $6 millones en promedio.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015