ALEXANDRA SERNA
LA PATRIA | MANIZALES
Está más cerca la posibilidad de que la carcasa de su celular o el lavamanos de su casa sea biodegradable y, por lo tanto, cuando lo deseche contamine menos.
La Universidad Nacional sede Manizales adelanta una investigación con la fibra de plátano, que se extrae del tallo y es biodegradable, para usarla como material industrial. En Colombia se utiliza en artesanías, como el fique (del que se extrae la cabuya), pero se podría aprovechar más si se aplican los avances de este proyecto cofinanciado por Colciencias y que en junio pasado lo presentaron en Portugal, en la Primera Conferencia Internacional de Fibras Naturales.
Lady Joana Rodríguez, estudiante de Maestría en Ingeniería Industrial, indica que la planta de plátano es un recurso natural que se está perdiendo y de ahí surgió el interés por investigar. "Una vez produce el racimo, la planta se tiene que cortar y no sirve para dar más frutos, como sí sucede con un árbol de naranjas. Las hojas y el tallo se vuelven basura".
Otra investigación de la Universidad reveló que cerca del 95% de los residuos que se generan del plátano no los aprovecha eficientemente el cultivador. Y si se tiene en cuenta que en 2011, según datos que publicó UNPeriódico, se cultivaron 353 mil hectáreas de ese vegetal -equivalentes a las reclamaciones de restitución de tierras al Gobierno-, la materia prima que se desperdicia no es de poca monta. En Caldas, de hecho, se sembraron 22 mil 500 hectáreas en 2012.
Para utilizar la fibra de plátano como material industrial la investigadora tuvo que sortear dos dificultades: es irregular y absorbe agua, por lo que se puede dañar. Ambas características son propias de cualquier fibra natural.
El tratamiento que se desarrolló y, según las pruebas, resultó efectivo consiste en sumergir 24 horas las fibras o delgados hilos en una mezcla de químicos, lavarlas con otros líquidos y ponerlas a secar otro día en un horno (ver fotos). Esto las hace casi impermeables y, por ende, menos absorbentes del agua, al tiempo que las alisa.
"Modificamos la fibra para hacerla más resistente a la humedad y poder usarla con otros materiales, como el cemento", agrega Rodríguez.
Los hilos tratados se mezclan luego con poliéster, que es un tipo de polímero o plástico inyectado en estado líquido y que se solidifica con otra sustancia -catalizador-. El resultado es una resina o pasta dura, que en la jerga científica se denomina biocompuesto porque combina un material sintético -derivado del petróleo y no biodegradable- con una fibra natural.
"Los biocompuestos adquieren mejores propiedades y lo que buscamos, a futuro, es combinarlos con polímeros naturales como el almidón, para que sean más amigables con el ambiente ", apunta la investigadora (ver recuadro Con mejores propiedades).
Esta innovación podría remplazar incluso las fibras de vidrio -no biodegradables-, carbón y las de origen 100% petroquímico -no renovables-, cuya principal función es reforzar la estructura de carros, cubículos de oficinas o carcasas de computadores, por citar algunos ejemplos.
Aparte de remplazar la madera para elaborar puertas, la fibra de plátano serviría para fabricar tableros, empaques de alimentos y utensilios de cocina. También podría usarse como geotextil, que sin la resina es una especie de costal que se pone sobre una ladera donde hubo un deslizamiento, para estabilizar el terreno.
"En otros países donde está más avanzada la investigación y las empresas la apoyan, es ya posible utilizar fibras naturales en la producción de partes de carros", expone Rodríguez para llamar la atención sobre la necesidad de apostarle a nuevos materiales.
En la investigación con la fibra de plátano, una vez tratada, se midieron las siguientes propiedades:
- Las fibras repelieron el agua hasta en un 33,3% y su resistencia a la humedad del aire aumentó en un 32,43%.
- Se incrementó su capacidad de soportar el calor en un 6,84%.
- Las fibras tratadas mostraron un aumento de su rigidez del 68,07% frente a las no procesadas.
- Aún si no se someten al tratamiento, en su estado natural, podrían soportar más un estiramiento, antes de romperse, que las fibras de plátano de otros países. Puede que las características ambientales de Colombia generen mejores propiedades en los cultivos.
- Abacá: se extrae de las hojas de una planta parecida al plátano y abundante en Filipinas. Se usa en filtros de cigarrillos, papel moneda y en carros Mercedes Benz.
- Algodón: es la fibra natural más popular y se extrae de una planta cultivada en unos 80 países. Se utiliza ampliamente en la industria textil.
- Alpaca: se extrae del pelo de un mamífero parecido a la llama, que se encuentra en Bolivia, Perú y Chile. La fibra también se usa en la industria textil.
- Angora: es una fibra proveniente del sedoso pelo blanco de un tipo de conejo doméstico. Las telas que se fabrican son ideales para ropa térmica y para quienes sufren de artritis y alergias a la lana.
- Bonote: se extrae de los tejidos que rodean la semilla de la palma de coco y se aprovecha industrialmente en India, Sri Lanka, Brasil, Indonesia, Filipinas y Vietnam. Se usa en la fabricación de soga, redes de pesca y para tapizar carros.
- Cachemira: proviene del pelo de la cabra kasmir y China es su productor mundial. Se utiliza en suéteres, bufandas, alfombras y chaquetas deportivas.
- Camello: con el hilo de este rumiante, trabajado principalmente en Asia, se fabrican abrigos, chaquetas y accesorios de invierno como guantes, gorros y bufandas.
- Cáñamo: se obtiene del tallo de una planta de la familia de la marihuana y China es su productor mundial. Ropa, papel, industria automotriz, tableros y concreto son sus principales aplicaciones.
- Lana: del pelo de las ovejas, se produce en al menos 100 países para los textiles. Entre las aplicaciones industriales se elaboran hojas de lana gruesa para aislar del frío y del ruido en las casas, y para cojines que absorban aceite derramado.
- Lino: hilo obtenido de una planta con flores pequeñas. Los productores líderes son Francia, Bélgica y los Países Bajos. Aparte de la industria textil, se usa en piezas interiores de carros y muebles.
- Mohair: se extrae del pelo de un tipo de cabra y Sur África es su mayor productor. Con esta fibra tejen prendas lujosas, sábanas, tapetes y tejidos de punto y crochet.
- Ramio: se obtiene de una planta nativa de Asia Central y las telas que se fabrican con esta fibra son livianas y sedosas. Con ella se hacen cordeles, sogas, redes y diversas prendas, desde vestidos hasta pantalones vaqueros.
- Seda: la produce un gusano que debe ser sacrificado en su fase de larva para extraer la fibra. Con ella se producen telas de alta moda, lencería y ropa interior. También es usada para suturas quirúrgicas y como injertos para huesos, cartílagos y reconstrucción dental.
- Sisal: se extrae de una planta parecida al fique y nativa de México. Lo utilizan en cordeles, sogas, colchones, papel, componentes de carros, muebles, tableros de tiro al blanco, ingredientes farmacéuticos y material de construcción.
- Yute: se obtiene de la corteza de una planta y la producen principalmente en Asia Central. Cubiertas de sillas, pantallas de lámparas, zapatos, empaques rígidos, papel y geotextiles, entre sus aplicaciones.
* Tomado de www.naturalfibres2009.org
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