
Osvaldo Hernández
LA PATRIA | Manizales
"Estos días son duros, porque recuerdo todo lo que pasó". Las palabras son del profesor Luis Ferrnando Montoya, quien el 22 de diciembre del 2004 fue atacado en su casa de Caldas (Antioquia) y quedó cuadripléjico.
10 días antes, Montoya Soto, con el Once Caldas, jugó la Copa Intercontinental que el equipo empató 0-0 en 120 minutos de juego con el Oporto de Portugal. En el desempate perdió 8-7.
LA PATRIA habló con Montoya, quien desde entonces libra tres batallas: por su vida, por volver a caminar y porque el Once Caldas le cumpla el acuerdo con el que se desvinculó laboralmente.
- ¿Cómo le pareció la final de la Copa Libertadores?
No me gustó porque los aficionados de bien, a los que les gusta el fútbol, se privaron de ver el partido. Eso no fue bueno para la familia del fútbol.
- ¿Esto cambiará el mapa futbolero en el continente?
Los clubes tomarán correctivos, pero tenemos que advertir que la Copa ya tendrá el próximo año sede única y eso será una novedad.
- ¿Cómo vio la eliminación de River Plate de la final del Mundial de Clubes?
Eso no es bueno para el fútbol suramericano y más con el campeón de la Copa Libertadores.
- ¿Le gustó la final de Junior y Medellín?
Me gustó porque hubo de todo. Goles, nerviosismo de los dos equipos, entrega, cansancio y se definió hasta el último minuto. Fue una final digna para todos y buena para los aficionados.
- ¿Qué tendencia ve en el fútbol colombiano?
Veo conceptos nuevos, antes se creía que los defensas eran para defender y los atacantes para atacar, pero ahora todos deben saber defender y atacar.
- José Fernando, su hijo, el niño que cargó en la Copa Libertadores del 2004, ¿ya se graduó de bachiller?
Sí, es un honor para mí verlo crecer, es una emoción grande. Ahí es cuando tengo que agradecerle a Jairo Quintero porque tuvo ese gesto tan bonito con nosotros y él ya tiene paga la universidad.
- ¿El Once nada que le paga el partido que le debe?
Cuando me pasó todo esto me acordé que un dirigente del fútbol me dijo que nunca demandara en el fútbol colombiano porque existía un pacto y no me contrararían más. Adriana, mi esposa, me preguntó que si lo hacíamos y le dije que no porque creí que me cumplirían, pero no pensé que esto iba a ser para toda la vida. Gracias a Dios allá hay gente bella, como Jairo Quintero, Carlos Arturo Gallego, Esteban Jaramillo y los generales Bedoya y Martínez.
- ¿Hasta cuándo va a esperar?
No lo sé, pero todo tiene un límite. Lo triste es que no les estoy pidiendo que me regalen, sino que me paguen lo que me deben. Tengo mucha gratitud por el equipo y la ciudad, pero me sorprende la pasividad de ellos conmigo.
- ¿Cómo vive esta época, justo en Navidad, la misma del atentado?
Siempre trato de salir adelante con las personas que me apoyan y eso me trae alegría.
- ¿Pero ha cambiado su forma de valorar todo esto con los años?
Estos días son duros, porque recuerdo todo lo que pasó. Es duro, no se lo deseo a nadie. Hay que tratar de aprender y vivir con más amor por todo.
- ¿Cree que volverá a caminar?
A veces creo que sí. Tengo el personal que me acompaña todos los días y estamos convencidos de que lo podremos lograr. Pero todo esto es de paciencia, tranquilidad y mucho trabajo.
- ¿Qué le está pidiendo al Niño Dios?
Gratitud a Dios porque me tiene con vida, con salud, a pesar de las cosas, por la gente que está a mi lado, Adriana, José Fernando, mis hermanos, mis amigos y el personal médico.
Sobre el futuro del nuevo técnico de Colombia, que reemplazará a José Pékerman, Montoya dijo: "Se demoran, pero ellos son los que conocen la situación y serán los que tomarán una decisión tan importante. Me gustaría un técnico nacional, aquí hay gente competente, pero también que hubiesen reuniones para compartir conceptos e ideas".
El profe Montoya valoró lo hecho por el Once Caldas en la temporada: "Muy buena. Desde el comienzo se alejó del descenso y soñó con volver a pelear por el título, algo que no sucedía hacía rato. Creo que el cansancio pasó la factura en algunos jugadores".
Agregó que con más futbolistas habría podido finalizar mejor: "Tres o cuatro jugadores más, para tener una mejor nómina, más amplia que le permitiera cumplir con el calendario, porque tuvo Copa y Liga".
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