La victoria se quedó en la garganta

LA PATRIA | MANIZALES

El partido iba 2-0 y el hincha del Once Caldas festejaba como hace rato no lo hacía en Palogrande. Ganarle al líder de la Liga Águila y a un rival encopetado como Atlético Nacional tenía otro sabor. Fue cuestión de minutos para pasar del éxtasis a las caras largas.

Llegó el descuento de Nacional al minuto 68 en los pies del delantero Luis Carlos Ruiz y la preocupación invadió a los aficionados locales. Muchos le gritaron al técnico José Flabio Torres controlar el juego, pero de nada sirvió con el empate del mismo Ruiz al minuto 74. La desilusión se reflejó en los rostros y algunos abandonaron el estadio. “¡No hay derecho!”, exclamó un espectador en Occidental.

El desespero fue mayor con el autogol del lateral Marlon Piedrahíta al minuto 80. La alegría se trasladó a la tribuna sur, donde los verdolagas iniciaron su carnaval.

El portero José Fernando Cuadrado no se rindió. Levantó sus brazos y empujó a sus compañeros. Tiro de esquina y por poco llega el empate. La fe seguía intacta como la tuvo el central juvenil José Luis Moreno, que al minuto 87 apareció de la nada y aprovechó un balón en el área para empatar la contienda. La alegría volvió a las tribunas, aunque al final la victoria se quedó estancada en la garganta de los hinchas blancos.

El dato

Al cierre de esta página, 8:30 a.m., la secretaria de Gobierno de Manizales, Paula Andrea Sánchez, indicó que no había ningún hechoqué lamentar entre las barras de Once Caldas y Nacional.