La hora de Quintana, ¿la era de Colombia?

Ramón Orosa *
LA PATRIA | Bilbao (España)

Sin duda el triunfo de Nairo Quintana en el Giro de Italia 2014 ha sido un hecho de impacto mundial. Pero quizás era un noticia esperada. Tras su segundo puesto en el Tour de Francia 2013, Nairo ya no es un 'tapado' en ninguna carrera y a todas las que acude desde entonces lo hace con el cartel de favorito.
En la 'corsa rosa' era el principal candidato al triunfo junto al desafortunado Joaquín Rodríguez. Y con los problemas de salud de 'Purito' estaba claro que llegaba la hora de Quintana. Como así ocurrió.
Aunque en tierras galas se confirmó la aparición del gran Nairo, fue en la Vuelta al País Vasco 2013 en la que se reveló ante el gran público europeo. Una carrera que ganó con una autoridad sorprendente en una crono y en la que se asomaron también a las posiciones de privilegio Carlos Betancurt y Sergio Henao.
"¡Qué buenos estos colombianos!" decían los siempre en vanguardia aficionados vascos, que se relamían con la posibilidad de ver de nuevo 'escarabajos' a la altura de los Lucho Herrera, Fabio Parra, Álvaro Mejía o Santiago Botero, por recordar solo a algunos de los más insignes representantes de un ciclismo aparcado una década sin saberse muy bien porqué razones.
Parecía un renacer andino. Si bien no del calado que ha expresado este último Giro. Se esperaba un nuevo protagonismo colombiano, con Quintana y Rigoberto Urán de estiletes, pero no tanto como el que han destapado las cumbres italianas.
Porque no solo Nairo y el ya muy europeizado Rigo -espléndido en su segunda plaza ya sin el soporte del rocoso Sky- han brillado en las grandes cumbres. Si no también una retahíla casi interminable de nombres: los que más Duarte y Arrendondo, aunque también el otro Henao -Sebastián-, Pantano, Anacona, Chalapud...
En fin, una larga lista que impresiona y que, con la tendencia del nuevo ciclismo de apostar por las etapas de montaña, que son las que más atención reciben de los aficionados, aventura un futuro más que halagüeño a un ciclismo que ha vuelto con una fuerza inesperada. Un regreso pletórico, arrollador y ganador. Tan potente que ya hay que le ve marcando una nueva época. ¿La era de Colombia?.

* Periodista especializado en ciclismo.