EFE | LA PATRIA
Comenzó a rugir el Tigre en la Liga Española. El colombiano Radamel Falcao García marcó tres goles ayer en la victoria de su equipo 4-0 frente al Atlético de Bilbao en partido que cerró la segunda fecha de la Liga.
Al igual que hace tres meses y medio en Bucarest, en la final de la Liga Europa que coronó a los madrileños como campeones, el desarrollo y el desenlace del encuentro le pertenecieron al Atlético con el mismo protagonista, Falcao, imparable de nuevo ante el equipo bilbaíno. Le ha marcado siete tantos en sus tres últimos choques.
El colombiano arrancó a tope. Está rápido, con fuerza y con ambición. En su reto es superar los 36 goles en 49 duelos oficiales del pasado curso, ayer lideró el triunfo de su equipo con tres dianas en el Calderón, el escenario donde está más cómodo, donde recibe más balones y donde destapa todo su poder goleador.
En el minuto 19 ya había alojado el balón en la red de la portería de Gorka Iraizoz. Le bastó una saque de banda, un amago a su marcador, Mikel San José, al que dejó fuera de combate con ese engaño y a golpe de zancada, para plantarse frente al guardameta, ante el que definió con talento, como el goleador que es.
El segundo fue a su estilo, recogiendo un centro desde la derecha y en una maniobra acrobática metió el balón para el 2-0. Y el tercero llegó con un penalti, en el que el arquero nada pudo hacer.
Tiago Mendes hizo el cuarto para el Atlético, que arrancó bien en la Liga y suma cuatro puntos. Falcao arrancó con su primer triplete.
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