Andrés Hurtado


Hablábamos de la lucha entre la avispa y la araña y decíamos que siempre gana la avispa. Estas avispas, que se encuentran en casi todo el planeta, pertenecen al género Pompilus y figuran como las avispas más grandes del mundo; su aguijón mide 7 milímetros, o sea casi un centímetro, lo que es una barbaridad; ello hace que estos insectos (artrópodos) tengan pocos enemigos. Digamos de entrada que las arañas no son insectos como a menudo dice la gente y muchos periodistas despistados (que los hay los hay). Las avispas sí son insectos. Decir que una araña es un insecto es como decir que un caldense es un tolimense. Pero ambos sí son colombianos. Una araña es un artrópodo y un insecto es un artrópodo, pero una araña es un arácnido y la avispa un insecto. Los artrópodos constituyen la división más grande de la fauna. Otras divisiones son aves, peces, mamíferos, reptiles, anfibios. Los artrópodos, como su nombre lo indica (de raíces griegas) tienen patas articuladas. Los artrópodos se dividen en insectos, arácnidos, miriápodos y crustáceos. Esto es bueno recordarlo para los lectores (y para mí mismo). Los insectos tienen tres pares de patas y todos tienen alas. Las hormigas y las avispas (ambos grupos pertenecen a los insectos) son primas y se clasifican como himenópteros. Las hormigas tienen alas y las pierden en una etapa de su vida. Precisamente las famosas hormigas culonas de Santander son "cazadas" cuando salen de sus nidos y vuelan, pierden las alas y caen al suelo; esto suele ocurrir por Semana Santa. Hormigas y avispas y abejas son insectos. Estos animalitos, los insectos, son el grupo más grande de la fauna mundial. Los científicos y desde luego los entomólogos, dicen que en la selva amazónica hay todavía millones (ojo: dicen millones) de insectos por descubrir y por clasificar. En mis periódicos viajes a la selva veo, en efecto, insectos rarísimos y muchos de ellos bellísimos.
Los arácnidos no son solo las arañas (llamadas propiamente araneidos), sino también los escorpiones, los acariformes (garrapatas), los uropígidos, los pseudoescorpiones, los palpígrados, los opiliones, los ricinúlidos y losamblipígidos. Todos estos arácnidos tienen parecido cercano a las arañas. De nuevo: las arañas son arácnidos, pero no son amblipígidos; las arañas son araneidos. Y las arañas y los amblipígidos son artrópodos. Los arácnidos tienen cuatro pares de patas. En fin, cosas de los científicos, cosas interesantes.
Sigamos con los dos grupos restantes de los artrópodos: los miriápodos y los crustáceos. Los primeros son los ciempiés, tanto los inocentes como los venenosos que se llaman escolopendras. Y los crustáceos son los cangrejos y demás "bichos de mar" que se les parecen.
Volvamos, pues, a los dos artrópodos que dieron origen a esta digresión: volvamos a la avispa (himenópteros) y a la araña (arácnidos araneidos).
Entre las muchas avispas que cazan arañas, la más venenosa es la Pompilusformosa. Algunas de estas avispas son de color negro azulado con alas rojizas y brillantes; otras tienen alas negras con reflejos metálicos azulados. No vuelan muy alto, pues su trabajo consiste en buscar arañas en sus nidos y por ello, como se detienen en cada agujero que ven en el suelo, las llaman avispas correo, como si fueran el cartero que toca a todas las puertas.
La avispa lleva siempre las de ganar, entre otras cosas porque tiene las defensas orientadas hacia abajo, igual que la araña; y como la avispa vuela y la araña no, ésta debe volverse hacia arriba para defenderse y presenta a la avispa todo su cuerpo y le facilita así el trabajo para que le clave el aguijón. (El tema me engolosina y no termina aquí.)
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015