Andrés Hurtado


Estábamos hablando de Juli, el pueblo llamado “La Pequeña Roma de América”. La primera iglesia que mentábamos es la de San Juan de Letrán. La construcción la iniciaron los dominicos y la terminaron los jesuitas, justo antes de que fueran expulsados de España y de sus dominios. Tiene forma de cruz latina y los altares están cubiertos de panes de oro y plata labrada.
Para hablar de la iglesia de San Pedro Mártir habría que poner “papel carbón” a la de Letrán. Fue iniciada por los dominicos en 1565 y terminada por los jesuitas en 1578. También adoptó la forma de cruz latina. Los dominicos tuvieron que marcharse del Perú por divergencias con el virrey Toledo, el mismo que culminó en 1572 la conquista de los incas para España y que mandó asesinar a Túpac Amaru, el último emperador del llamado incainato de Vilcabamba. Es célebre la anécdota de la cita que pidió Toledo al rey Felipe II a su regreso a España. El rey no quiso recibirlo y le mandó decir: “Lo mandé a servir reyes, no a matar reyes”. El templo de San Pedro, como el de San Juan de Letrán, tiene elementos mestizos de la raza aymará.
El tercer templo es el de Nuestra Señora de la Asunción, construido en la misma época, o sea en el siglo XVI. Primero se llamó iglesia de Santa María la Mayor, exactamente como otro de los templos insignia de los católicos en Roma. El interior conserva las pinturas del jesuita Bernardo Bitti, trabajadas al mejor estilo manierista de moda en esa época en Italia. El crítico de arte Manuel Soria dice que Bitti es el mejor pintor de Sur América del siglo XVI.
La cuarta (¿y última?) iglesia se construyó como San Ildefonso y luego se le cambió el nombre por el de Santa Cruz de Jerusalén. A juzgar por los restos que de ella quedan debió ser de una pasmosa fastuosidad. Me impactaron mucho los arcos de la entrada. Un rayo la destruyó en 1914 y los habitantes de Juli hablan de los espíritus malignos que rondan por las ruinas durante la noche.
El guía nos protestó cordialmente porque en las indagaciones preliminares que siempre hago sobre los lugares que voy a visitar, leí y le dije de las cuatro iglesias de Juli. Nos dijo que no son cuatro sino cinco; que en la base de uno de los cerros hubo otra llamada de Santa Bárbara, de la que no quedan sino piedras y el lugar está hoy cubierto por un bosque.
Hasta este pueblito perdido en los repliegues de los Andes llegó la Inquisición y así quedan las ruinas de su sede en la Plaza de Armas. También la llaman la Casa Cuentas. En Perú las plazas principales Colombia Plaza de Bolívar. Es preciso recordar que Bolívar fundó a Bolivia, separándola de Perú, con el nombre de Alto Perú. Así que la veneración por el Libertador no es tan grande por esos pagos, como lo es entre nosotros.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015