Estas fiestas de Navidad y Año Nuevo que a veces detonan el estrés hacen que cuerpo y mente muestren signos de cansancio y desgaste, lo que bloquea una estrategia básica para la vida saludable: mantener hábitos de alimentación.

Esto permite que nuestro cuerpo tenga la energía adecuada para enfrentar los desafíos diarios, pero es común en esta época descuidar las horas de comida y se confunde con facilidad, porque no es lo mismo comer un plato de frutas que un chocolate con dos buñuelos.

Estos días son especiales para compartir con familiares y amigos, sobretodo platillos que solo se ven en esta temporada; el problema es que muchas veces se come demasiado y entonces llega el consecuente malestar estomacal del día siguiente. Se les olvida el tamaño de las porciones, que casi siempre es mayor al gasto calórico que disminuye considerablemente, aumentando el número de personas sedentarias.

Tampoco hay que ir al otro extremo, no son convenientes las restricciones calóricas bruscas o drásticas seguidas de peligrosos periodos de desinhibición o del conocido "efecto rebote"

Para que no crean que esta será la última cena, coman, disfruten y compartan con alegría la venida del Señor, siguiendo los siguientes consejos:

* Controle los tamaños de las porciones, el reducirlas no supondrá un esfuerzo significativo y a cambio puede reportar resultados exitosos a corto, mediano y largo plazo.

* Consuma una alimentación completa, equilibrada, suficiente, equilibrada y ligera.

* Ingiera líquido de manera controlada, mientras esté comiendo tome la menor cantidad de líquidos posibles como agua, alcohol, gaseosas, ya que estos podrían diluir el ácido clorhídrico dificultando la digestión.

* Coma despacio y mastique bien los alimentos. Esto es muy importante ya que la digestión de los carbohidratos, que es lo que más abunda, comienza en la boca.

* Recuerde que la combinación de alimentos pesados hacen que el estómago tome hasta 12 horas para hacer su digestión.

* Tenga presente frutas y vegetales, así estará consumiendo fibra que lo que ayudará a controlar el consumo de alimentos.

* Sea un buen anfitrión. Cerciórese que sus sus comensales no tengan dificultad con algunos nutrientes, por ejemplo alergia o intolerancia (lácteos y sus derivados) o perjudique su patología (diabéticos, hipertensos).

* Muévase, baile o camine con frecuencia y respire profundamente esto le ayudará a oxigenar su cuerpo y sentirá menos deseos de comer más.

*Nutricionista Dietista. Clínica. Universidad Nacional de Colombia Educadora acreditada en Diabetes. <saludablearas@yahoo.com.co>