¿Ante el aumento de la tendencia a la cremación de los muertos, estarán forzados a desaparecer los cementerios o jardines cementerios de la malla urbana?

El Sacerdote Cesar Augusto Cano Ríos, Vicario Parroquial de la Iglesia de Cristo Rey, considera que el cementerio es el sitio donde van a reposar los despojos mortales de los difuntos y que a la vuelta de los años, con la pérdida de la costumbre, las bóvedas existentes en estos se convertirán en osarios donde reposarán dichos restos. Agrega que la Iglesia da la libertad a los hijos de Dios para cremar los restos mortales de sus seres queridos. La cremación se da porque algunos creen que al enterrar el cadáver para después de cinco años volver a exhumarlo es doble sufrimiento. Aclara que al final somos polvo y en polvo nos hemos de convertir tal como se dice el miércoles de ceniza. Lo que se pide es que se haga con respeto. Por eso la existencia de los osarios y los cenizarios en los templos, en las criptas, en los cementerios y en las funerarias. No es bueno que los restos permanezcan en la casa.

El hecho de que desaparezca el concepto de inhumación no le quita al cementerio el concepto de campo santo. Considera que mientras permanezcan restos mortales dentro de un cementerio no se le puede cambiar de uso. Siempre será un campo santo al que se irá a orar o a meditar. Es un sitio donde reposan los restos de nuestros seres queridos y de los seres queridos de otros, concluye.

Pedro Cardona, coordinador del cementerio de San Esteban, piensa que la inhumación ha disminuido con relación a otros años. Hace diez años se presentaban entre cinco y siete entierros diarios. Hoy pasan hasta cuatro días sin entierros porque la cremación es más usada.

Agrega que hoy se presentan mayor cantidad de muertes violentas que antes. Para estos casos, la Fiscalía no permite cremar el cuerpo y muchas veces después de los cinco años se reabre la investigación teniendo que enterrar los restos hasta por un año más. Adicionalmente en el cementerio se puede comprar un osario para que los restos permanezcan allí de por vida.

Con relación a costos, en el cementerio -Hito Arquitectónico- se entierran adinerados y pobres, pero aclara que hay una zona especial para el sepelio de personas de escasos recursos, donde las fosas son gratuitas y hasta en muchas ocasiones la Alcaldía dona el cajón.

En su concepto la cremación “es la que está de moda”.

Para Robinson Rincón Hernández Director de servicios de Sercofun Caldas - Funeraria los Olivos, el tema de cremación tiene tres puntos de vista:

l- Cremar inmediatamente significa ahorro de dinero. Si se sepulta a una persona de todas formas habrá que exhumarla y cremarla posteriormente.

2- Los cementerios -con todo el respeto- son un foco de contaminación.

3- El duelo es mucho más llevadero sicológicamente con la cremación, pues habrá un primero y único impacto.

El asunto también es generacional. Existe una relación entre el porcentaje de fallecimientos de personas adultas y personas jóvenes y el porcentaje de cremación. Estos últimos quieren o prefieren la cremación. Desde la estadística de la empresa los porcentajes son del orden del 70 % inhumación y 30% cremación, esta última con tendencia a crecer.

Señala que otro punto importante es la muerte violenta y accidental, pues aquí la Ley no permite la cremación.

En su opinión los cementerios como espacio urbano nunca podrán desaparecer a no ser que la Ley sea modificada, siempre deberá haber un espacio donde se entierre a los fallecidos violetamente, más bien se modificarán sus funciones como, por ejemplo, usar bóvedas en vez de tumbas en tierra, sitios donde se puedan tener las cenizas sin que causen ningún tipo de contaminación.

COMENTARIO ADICIONAL: La evolución en las costumbres sociales toma su tiempo. También es probable que se modifiquen las leyes. Solo con el paso de los años se apreciará dentro de lo histórico, social y cultural, la afectación que estos cambios en los espacios dedicados al reposo de nuestros muertos producirá a la retícula urbana.

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