Mario César Otálvaro


Mario Cesar Otálvaro
LA PATRIA | Bogotá
Emanada de un juzgado de Manizales se conoció la triste noticia de la orden de liquidación del Deportivo Pereira. Con ella muere parte importante de la historia del nuestro fútbol, y desaparece el gran clásico del eje cafetero por la ausencia del eterno rival del Once Caldas.
Aunque 60 años no le alcanzaron para titularse campeón, el cuadro Matecaña deja huella en los anales del certamen. En 4 ocasiones en torneos largos fue tercero, cuando los lugares de privilegio estaban reservados para los equipos grandes de las principales ciudades del país.
Allí los paraguayos montaron su refugio, y de la mano de hombres como César López Fretes llegaron atacantes de la talla de Julio Gómez, Apolinar Paniagua o Aristides Delpuerto, y se dieron el lujo de contar con 2 de los más talentosos volantes de todos los tiempos, Jairo Arboleda, y el peruano César Cueto.
Muchos de grata recordación en el Once igualmente hicieron parte fundamental de la vida del Pereira, como aquel recordado plantel del 82 orientado por Gilberto Osorio que contó con los también excaldistas Antonio Ríos, Sergio Cierra, Óscar Quintabani y Farid Perchy.
Pereira fue siempre un equipo batallador, particularmente en el Mora Mora, porque el fastuoso Hernán Ramírez terminó siendo demasiado estadio, pues desde su primer descenso de categoría en el 97 fue un club venido a menos por falta de dirigencia, y de dolientes.
Para los seguidores del fútbol la lastimosa situación del popular conjunto de la Perla del Otún constituye un hecho inquietante, deplorable y vergonzoso, y nos pone en alerta sobre el futuro de otras gloriosas instituciones que correrían la misma suerte.
Solo resta desear que la pujante Pereira, querendona, trasnochadora y morena como se le llamó alguna vez, vuelva a contar pronto con un equipo profesional que esté a su altura.
Planteó el tema de entrada porque recuerdo esa linda rivalidad, exenta de violencia, cuando en la tribuna se mezclaban los colores de las camisetas en contienda, y porque la historia que hoy escribe el Pereira la podría estar viviendo el Once Caldas, si no fuera por la oportuna presencia de Kenworth de la Montaña.
Los anteriores dirigentes lo llevaban a esa tumba, y así no haya todavía una consolidación de empresa acorde con la prestigiosa firma transportadora, se está más cerca, y los vientos de renovación están operando, aunque más lentamente de lo que se quisiera.
Fiel al estilo de esta columna, independiente y crítica del manejo deportivo, y contradictora por la cicatería como se armó el grupo para el segundo semestre, esto no obsta para reconocer el esfuerzo de Kenworth de la Montaña para garantizar la continuidad del Club.
Y por eso extiendo la invitación para no abandonar a este Once Caldas que es nuestro, más allá de que en papeles se señale lo contrario, y sin la certeza de que vaya a brindar un buen espectáculo, pero por lo menos hay equipo, así técnicamente esté tan mal dirigido.
Llegará el momento con dirigentes que sepan del negocio, atrevidos, que actúen conforme al musculo económico que los respalda, que no regalen los pases de los jugadores, lo que es insólito y absurdo, y que comprendan que estos son la base de un buen conjunto y plataforma del éxito financiero.
No por recomendaciones de quien le carga la maleta al señor Pineda cuando llega a Manizales, ni de aquellas ‘soba chaquetas’ que van detrás de una pauta comercial aplaudiendo cuanto se hace, ni con un entrenador acomodado, que no exige mientras sus intereses personales estén a salvo.
Las cosas se caen por su propio peso, y este será un semestre de sufrimientos, con alegrías parciales, sin grandes objetivos porque se tiene el mismo técnico que malgastó los recursos del primer torneo, una nómina inferior, y un plantel al que le falta mucho para ser ciertamente competitivo, y eso que en Colombia no se necesita mucho para ganar.
Hasta la próxima…
macotal@yahoo.com
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015