Desde la fundación de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación el 16 de Octubre de 1945, cada año se elige un tema y para este eligió las Cooperativas.

Este hecho les hace un reconocimiento como aliadas naturales en la lucha contra el hambre, la pobreza extrema y la malnutrición invitando a la solidaridad.

Las últimas décadas se han caracterizado por la inestabilidad en la inversión agrícola y los productores se han esforzado por responder a las crisis ocasionadas por el cambio climático, los mercados y los precios que no han ayudado en pro del avance.

La información recolectada demuestra que las cooperativas y organizaciones de productores están en condiciones de superar estas dificultades y mitigar los efectos negativos de las crisis alimentarias. Han sido capaces de sortear los obstáculos relacionados con el mercado y las políticas cambiantes, mediante el suministro de bienes y servicios a sus miembros, por ejemplo, reduciendo los costos para los agricultores gracias a compras colectivas de insumos agrícolas permitiéndoles, de esta manera, un beneficio de mejores precios al por menor.

Les ofrecen también la posibilidad de expresar sus necesidades y preocupaciones y desempeñar un papel en los procesos decisorios y de formulación de políticas.

Hay numerosos ejemplos para destacar. Organizaciones integradoras que fomentan la acción colectiva de personas cuyos medios de vida dependen de actividades como: la agricultura, la pesca, la ganadería, la actividad forestal y/o del empleo de estos sectores, que generalmente es inestable.

Le apuestan a la diversidad biológica para la agricultura y a la producción de alimentos, conscientes de que cada vez se reduce la variedad porque es el mismo hombre quien presiona cada vez más sobre las especies que están en peligro y se interrumpen procesos naturales como la polinización por los insectos y la regeneración de los suelos por los microorganismos.

Estas organizaciones actúan en el ámbito comunitario, esforzándose por cambiar los objetivos económicos y sociales de sus miembros. Diversas entidades respaldan el surgimiento de más organizaciones de productores y cooperativas que sean autónomas, inclusivas, equitativas y orientadas al mercado.

El crecimiento económico en la reducción de la malnutrición crónica que sigue elevándose y la erradicación del hambre continúa siendo un desafío mundial. El crecimiento agrícola debe llegar a los pobres, porque la mayoría de ellos están en zonas rurales y dependen de la agricultura como una parte importante de su medio de vida.

Entre las políticas y programas que permiten que el crecimiento incluya la dimensión de la nutrición, figuran el apoyo a una mayor diversidad de la dieta; a pesar de que tarda en llegar a los pobres y quizás nunca llegue a los más pobres de los pobres, no solo depende del Estado sino de los civiles que participan.

Por eso tengamos en cuenta que la solidaridad internacional o nacional es algo en lo que todos podemos participar.

* Nutricionista Dietista Clínica Universidad Nacional de Colombia y Educadora acreditada en diabetes.
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