Bernardo Mejía


Los manizaleños tenemos que estar muy agradecidos con el gobierno nacional, porque sin que tengamos que poner un peso del presupuesto municipal, ni que se haya tenido que hacer derrame de valorización, nos están construyendo una avenida que va desde la Estación Uribe hasta Potro Rojo.
El tramo comprendido entre San Marcel y la Terminal ya es una avenida a la que se le hicieron varios puentes, se solucionó el conflicto vial que se tenía para acceder a Villamaría, se espera que para finales de este año se ponga en servicio la glorieta en el sector de la Fuente y está en proceso la construcción de las ampliaciones de la vía en el tramo de la Fuente y la Estación Uribe.
En los últimos años el sector de San Marcel se ha vuelto uno de los puntos más críticos para la circulación de los vehículos en las horas pico. Por este sitio confluyen los vehículos que transitan para el sector industrial, el barrio La Enea y la Florida, que entre otras ha tenido un gran desarrollo en los últimos tiempos y obviamente los que van para el oriente del departamento y para Bogotá.
El gobierno nacional ha manifestado que espera iniciar en noviembre la construcción de la glorieta de San Marcel. Esta obra va a ser a desnivel, su diseño de ingeniería es bastante interesante e incluye un nuevo puente para acceder al barrio La Enea. La construcción de esta glorieta en San Marcel es el comienzo de la doble calzada desde este punto hasta Potro Rojo, obra que incluirá también la construcción de una glorieta a nivel, en el empalme de esta vía con la que va a las instalaciones del Sena.
La glorieta de San Marcel y la doble calzada hasta Potro Rojo son obras que está requiriendo la ciudad urgentemente; sin embargo, hay que hacer una planificación de cómo se va a manejar el tránsito vehicular por ese sector de la ciudad durante su construcción. Actualmente transitar por allí en horas pico y especialmente entre las siete y las nueve de la mañana es bastante difícil, lo que tenderá a complicarse aún más cuando se inicien los trabajos mencionados.
Para manejar las dificultades en el desplazamiento vehicular en San Marcel hay que tener en cuenta que próximamente se dará al servicio el retorno que se está construyendo en las cercanías de Lusitania, que servirá para que los conductores de los vehículos que salgan de la Florida y se dirijan hacia el centro de la ciudad no tengan que subir hasta la glorieta de San Marcel, lo que ayudará a aliviar el tránsito que circula por allí.
La doble Calzada entre San Marcel y Potro Rojo es el inicio de la vía Manizales-Mariquita, carretera a la cual en los últimos años se le han hecho muchas mejoras, sobre todo obras de contención, que han permitido que no se hayan vuelto a presentar derrumbes sobre ella. Obras que han sido beneficiosas; sin embargo, los manizaleños no debemos bajar la guardia en la necesidad de tener una vía de mejores especificaciones que nos comunique con Mariquita. La carretera actual es una vía de precarias especificaciones técnicas, con altas pendientes, con un exceso de curvas y que prácticamente cumplió su ciclo.
No me queda duda de que si Manizales quiere estar vigente en el contexto nacional requiere tener una mejor vía de comunicación con el Magdalena Medio, que nos permita aprovechar fácil y cómodamente todo el desarrollo vial que se está dando alrededor del río Magdalena. También hay que tener claro que esta carretera no solo nos serviría a nosotros los manizaleños sino a todo el país, porque es la vía alterna entre el oriente y el Océano Pacífico.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015