A Tony lo hirieron con un machete

Albeiro Rudas

qhubomanizales@lapatria.com

Ladrar es algo natural en los perros, pero a Tony, Un perro callejero de Anserma, casi le cuesta la vida después de que dos jóvenes le propinaran un machetazo en el lomo, solo porque le ladró al perro que ellos llevaban.

Los hechos ocurrieron en la carrera sexta con calle 7, cerca al parque de Robledo y a la Alcaldía de ese municipio. Según testigos, los jóvenes al ver la reacción de Tony intentaron cortarle la cabeza, pero el canino al evadir la agresión recibió una herida en su lomo de 25 centímetros de largo y cuatro centímetros de profundidad.

Martha Restrepo, directora de la Biblioteca PúblicaMunicipal y defensora de los animales, no ocultó su rabia e indignación por la situación e indicó que el canino agredido frecuentaba la zona y una vez herido buscó refugio en medio de alaridos.

Solidaridad

Ante este hecho de maltrato animal la solidaridad de los vecinos no se hizo esperar y avisaron a la Policía de los hechos y condujeron al animal a una veterinaria.

El veterinario Humberto Giraldo atendió a Tony, le saturóla herida y le aplicó medicamentos para evitar alguna infección. Luego, lo entregó a la Sociedad Protectora de Animales para que allí se recupere.

"Se debe acabar con el maltrato animal en el municipio,debido a que son muchas las denuncias y casos de envenenamiento, abandono y heridas causadas a mascotasespecialmente a perros y gatos", dijo Giraldo.

Varias personas se ofrecieron a donar alimento y medicamentos para el canino. Asimismo, La Policía solicitóa la ciudadanía colaboración para capturar a los agresores y aplicar las sanciones por maltrato animal, pues al parecer, los jóvenes venían de una finca por herramientas.

Datos de contexto

*4 de noviembre del 2014 en la vía Manizales-Pereira la propietaria de un vehículo Chevrolet, de placas OYL331, en su parte trasera arrastraba un perrito con una cadena.

*27 de noviembre del 2014 Karla, de dos años, recibió un machetazo en la cabeza y parte de su ojo, al parecer por tratra de agredir a un trabajador de una finca ubicada en la vía a Murillo, cerca al Nevado del Ruiz.