Semana Santa en Salamina: Una tradición que debe permanecer

Luis Fernando Rodríguez

LA PATRIA | SALAMINA

En la temporada de Semana Santa en Salamina, el número de turistas aumentó y para sorpresa de algunos y disgusto de otros, la Parroquia de la Inmaculada Concepción cambió los recorridos y sitios habituales de partida y llegada de las procesiones. Los fieles se han acomodado, pero desorienta y en ocasiones desanima a quien llega de otras ciudades.

Es de resaltar, entre otras cosas, el arreglo especial para estas fechas de la Basílica Menor de la Inmaculada Concepción, el recogimiento y asistencia a los actos litúrgicos de los católicos, la colaboración con la logística en la organización de los procesiones de la Alcaldía y, sobre todo, la asistencia de algunos estudiantes a los desfiles.

El miércoles Santo hubo concierto de música Sacra en la plaza principal, y durante toda la semana, exposiciones de pintura y fotografía, de artistas salamineños en el Ceres, la Casa de la Cultura Rodrigo Jiménez Mejía y el Club Chamberí.

Sin permiso

Desde hace años, a la Semana Santa en Salamina la acompañan los estudiantes de los planteles educativos del casco urbano, pero este, la Secretaria de Educación Departamental, en un comunicado a los rectores, negó el permiso. Por lo que escuelas y colegios tomaron sus vacaciones esta semana. A las procesiones, asistieron de forma voluntaria, algunos estudiantes, docentes y rectores.

La rectora encargada de la institución educativa La Presentación, Pastora Ceballos de Fonseca, desde Pereira manifestó: “la Administración Municipal debería mandar con anterioridad un proyecto de la programación de Semana Santa a la Secretaria de Educación Departamental y a los Ministerios de Educación y de Cultura, para laborar algunos días de esta semana, asistamos a los desfiles y se nos dé libre la semana de Pascua”.

Concluyó: “Si a futuro no hay permiso. En las instituciones educativas nos debemos organizar y programar la asistencia a los actos de Semana Santa. Porque esta tradición religiosa en Salamina, no se puede dejar perder”.