Indígenas en Caldas se mantienen firmes en la minga

Esta semana es crucial para los indígenas concentrados en la parcialidad La Trina (Supía) y los que participan en la minga en otros lugares del país. 

Ellos reclaman cinco puntos pactados en anteriores negociaciones con el Gobierno: garantías a los derechos humanos, territorio y medioambiente, paz con justicia social, acuerdos incumplidos, y presupuesto.

Los de Caldas protestan por los daños ambientales y sociales ocasionados por el proyecto vial Pacífico Tres, la megaminería, los homicidios de los últimos días y los ataques a miembros de la guardia indígena.   

Emberas siguen llegando al punto de concentración, situado a 20 minutos de Supía, donde unas 400 personas de los municipios del bajo occidente de Caldas y de Quinchía, (Risaralda) están congregados desde el pasado 30 de octubre. 

El Gobierno Nacional instaló la mesa de negociaciones en el resguardo Las Mercedes, en Caldono, (Cauca). Han discutido sobre derechos humanos, el retiro de la Fuerza Pública del territorio, la no judicialización de los mingueros, el despeje de vías y el respeto a la libre movilización.

El fin de semana, hubo taponamientos escalonados en la vía a Supía, por la presencia de manifestantes. La carretera Medellín-Manizales operó con normalidad.

Aún no hay claridad de los heridos durante las manifestaciones, los indígenas hablan de  cinco, podrían ser más. Los hospitales de la región, hasta el momento no han atendido indígenas heridos.

En Caldas, reclaman hablar directamente con el gobernador, Guido Echeverri, para que cesen los hostigamientos de la Fuerza Pública.  

Los medios de comunicación no han podido ingresar al punto donde los indígenas están concentrados, por medidas de seguridad que adecuaron. Lo que sucede lo dan a conocer a través de las redes sociales.