Esfuerzo comunitario en el Santa Mónica, barrio de Chinchiná

Julián García

LA PATRIA | Chinchiná

Las familias de la Urbanización Santa Mónica de Chinchiná suman esfuerzos y dedicación para construir sus viviendas.

Hacen convites y pagan la mano de obra de los oficiales de construcción para ver realizado el sueño de tener casa propia, el cual maduran desde hace 15 años, cuando compraron el lote ubicado en la subida al sector de los tanques de Empocaldas.

Participan también del proyecto de Bloqueras Comunitarias por autoconstrucción de la Gobernación de Caldas y hasta hace un mes elaboraron 12 mil bloques de cemento y arena, necesarios para edificar las 10 primeras casas de las 41 proyectadas en la urbanización.

El Municipio de Chinchiná les aportó material de río y cemento, y la Gobernación, un operario y la maquinaria.

Orlando Ríos, propietario, contó que habita en arriendo con otros tres familiares en el Condominio Caldas y el predio de Santa Mónica lo adquirieron a través de rifas, colectas y bazares.

Por etapas

La urbanización consta de tres etapas, una da hacia la ladera y es donde construye Orlando, quien desempeña el oficio de reparar consolas eléctricas. Por estos días se dedica a meterle el hombro al proyecto habitacional. Contó que la cimentación de las viviendas corre por cuenta de los propietarios y en esto ha invertido $17 millones y aportó mano de obra no calificada para ayudar a hacer los bloques. Madruga a mezclar el concreto y a doblar el hierro y a soñar con la materialización de su casa.

Las viviendas están proyectadas para una planta, con dos habitaciones, sala, comedor y patio cubierto. La Junta Comunal de Santa Mónica gestiona la instalación de los servicios públicos de acueducto, alcantarillado y la conexión a la electricidad, y deben cederle unas calles al Municipio para que instale las tuberías.

“Tenemos unas redes eléctricas que pasan sobre los terrenos y las deben retirar, en febrero estaríamos ocupando las casas. Lo bueno es que uno mismo construye su propia vivienda a su gusto y está pendiente de los pequeños detalles”, manifestó Orlando.

La Secretaría de Vivienda de Caldas también llevó las bloqueras comunitarias a Viterbo, Neira, Pácora, Pensilvania y Salamina.

El secretario de Vivienda y Territorio, Jahír de Jesús Álvarez, señaló: “Con el sistema de bloqueras se construirán 170 viviendas en el departamento”.

55 metros cuadrados mide cada residencia y tienen un costo de $35 millones aproximadamente.