Detrás de la construcción del nuevo colegio de la vereda Llanadas, de Manzanares, hay varias hazañas. Lo primero es que estudiantes, profesores y directivos tuvieron como salones de clase la capilla, la casa comunal, la granja, entre otros espacios. También es una proeza que la institución educativa haya mantenido 220 alumnos en promedio.
En mayo del 2006 tuvieron que empacar cuadernos y salir de la antigua sede, debido a un movimiento de tierra en masa que amenazaba con arrasar la estructura. “Apenas el año pasado regresamos al lugar, luego de que Corpocaldas adelantó trabajos en la zona”, dice el rector de la Institución Educativa Llanadas, Nelson Murillo.
La comunidad educativa espera la terminación de un nuevo plantel ubicado a una cuadra del antiguo. Las obras están prácticamente listas para el primer y segundo piso.
Los hermanos David y Jhon Sebastián Martínez, quienes hicieron la primaria en la escuela de la vereda La Ceiba, vecina de Llanadas, les ha tocado el bachillerato en el restaurante escolar, en salones sin puertas y sin ventanas.
Sandra, madre de los dos jóvenes, comenta: “es una dicha que el colegio está casi listo. Mi sueño es que mis hijos puedan terminar sus estudios con aulas decentes, pues les ha tocado muy duro, en sitios muy incómodos”.
La sorpresa
Los recursos, construcción y dotación del colegio fueron adjudicados por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), dependencia de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
“Un día cualquiera encontré a unas personas extrañas en el colegio. Resulta que venían para lo de la construcción, después de gestiones, luchas y procesos durante cuatro años. Hoy estamos muy felices”, dice Murillo. “Estamos apunto de ver realizado este sueño”.
El rector agrega: “el tercer piso se está retomando, después de una para de tres meses, ya que fue necesario rediseñarlo. Es decir, se reanudó la segunda y última fase”.
De acuerdo con lo estipulado con la empresa contratista Proesa Ltda., de Popayán, ganadora de la licitación, la obra será acabada y entregada oficialmente en mayo próximo.
La dotación
El rector indicó que en febrero pasado la OIM entregó en las instalaciones del colegio de la vereda Llanadas, de Manzanares, la dotación nueva y completa del mobiliario requerido para su funcionamiento. Los elementos son los siguientes:
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280 sillas universitarias para los estudiantes.
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410 butacas metálicas para el laboratorio de física y química.
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8 tableros acrílicos de 2,45 metros por 1,25 para cada aula de clase.
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8 escritorios para los docentes de las aulas.
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