Cooperativa Ovina de Marulanda (Caldas), con planes de expandirse

LA PATRIA | MARULANDA

La Cooperativa Ovina de Marulanda proyecta nuevos planes de inversión y diversificación agropecuaria que fortalezcan la capacidad productiva de la empresa.

De acuerdo con Alfonso Patiño, presidente del Consejo de Administración de la empresa, después de 78 años de trabajo y de superar la difícil situación financiera, ahora la meta es crecer en su principal tarea, como es la producción ovina, pero adicionalmente incrementar el turismo.

En lo que respecta a su primer renglón, la meta es aumentar el número de ovejas, que hoy rodea las 2 mil 100 cabezas, para incrementar la producción de la lana y por ende, la transformación de producción artesanal de ruanas, cobijas y mantas, conocidas en varios rincones de Colombia.

Aunque el proceso no es fácil, según Patiño, el interés es llegar siquiera a las 5 mil cabezas, con el apoyo de los 216 socios que hoy hacen parte de la cooperativa, de tal forma que se aumenta la mano de obra. Hoy se generan solo unos 18 empleos, entre la parte administrativa, de producción e industrial.

El interés es contar con mayor materia prima de lana virgen, que hoy solo equivale a unos 4 kilos de lana por oveja, igual a unos 8 mil 400 kilos anuales. Sin embargo, hoy también se le compra lana a varios productores independientes.

La entidad también se dedicó a la producción lechera de ganado vacuno, pese a lo cual, por ahora solo cuenta con 27 cabezas en producción.

Unido a ese plan, el interés es fortalecer el turismo, con la construcción de una finca hotel en un terreno de la cooperativa, para incrementar el turismo ecológico. La inversión está estimada para el 2016 en unos $180 millones.

Pese a la baja inversión de este proyecto, de acuerdo con Patiño no se trata de un trabajo fácil, más con la recuperación lenta que ha tenido la empresa, y que alcanzó a reportar pérdidas de hasta $69 millones hace seis años.

En los últimos años logró llegar a un punto de equilibrio, y el año pasado pudo reprotar excedentes cercanos a los $30 millones. Para este período se estiman por lo menos unos $40 millones.

Creación

En 1937 se creó la Cooperativa Ovina, luego de que el sacerdote jesuita Francisco Javier Mejía, motivado por la corriente de las cooperativas europeas, optó por formar una granja lanar en Marulanda dadas las características de altura de la región, la calidad de sus pastos y las perspectivas económicas de esta industria.

29 campesinos acogieron la idea, cada uno aportó una oveja y después de muchas gestiones ante el gobierno nacional y diferentes organismos departamentales y municipales lograron adquirir las tierras que hoy constituyen su principal patrimonio.