Andrés Roca Rey, revelación y tesón del toreo
Fecha Publicación:
Domingo, Enero 10, 2016
Fotos | Darío Augusto Cardona | LA PATRIA
Andrés Roca Rey fue ovacionado por la afición manizaleña luego de indultar a Incógnito, su segundo de la tarde del 5 de enero
Luis F. Molina
EL PREGONERO | Manizales
Cuando se habla de Incógnito, el toro indultado el pasado martes en la Plaza de Toros de Manizales, se debe hacer una asociación obligatoria con Andrés Roca Rey, un joven torero nacido en Lima (Perú) en octubre de 1996 y que es la revelación del toreo americano. En su primera visita a la ciudad como matador logró su primer indulto, lo que le ha valido escribir el nombre de Manizales en su memoria.
LA PATRIA habló con él un día después del festejo que le brindó las dos orejas al diestro limeño.
¿Cómo fue la experiencia de indultar al toro Incógnito?
Yo creo que son cosas bonitas de las corridas de toros, cuando tú le perdonas la vida a un toro, cuando se la perdona también el público, el presidente y el mismo ganadero. Creo que participar en disculparle la vida es una cosa muy bonita y es la primera vez que vivo esas sensaciones y me gustaría que no fuera la última vez.
¿Tiene chispazos en la memoria de la faena del toro Incógnito?
Sobre todo cuando salía de las tandas ver al público de Manizales parado de los asientos creo que fue muy bonito y algo que me hizo acordar de tiempos atrás, como los entrenamientos y las ganas que se le ponen a esta profesión.
¿Cómo genera esa conjunción con el toro que ya lo hace sobresalir a usted?
El toro es un animal, como todo, que sale sin saber lo que va a pasar. Que sale a embestir a lo que pase por delante y en la lidia con el capote debes tratar de enseñarle por dónde tú quieres que vaya y, al final, lo bonito de una faena es hacer con el toro lo que uno quiera, pero sin faltarle al respecto y en eso consiste el toreo.
Con la afición
Compagina usted muy bien con la afición de Manizales, ¿cómo lo logra y cómo lo siente?
Yo creo que la gente que va a la plaza es la base de la fiesta y sin público no se vivirían momentos tan emocionantes. Aparte del toro y el torero que son importantes, el público se convierte en uno de los más importantes, pues cuando llegas a tener una conexión bonita con el toro y cuando se compenetran entre toro y torero y eso llega a la gente y les emociona tanto, pues tú, que estás abajo, sientes que te transmite algo muy bonito. Creo que en mi vida tanto profesional, como en la normal, los momentos más emocionantes que he vivido han sido en una plaza de toros.
¿Alcanzó a ver la bandera de Perú en los tendidos de sol sombra?
Sí. Vi dos banderas. La verdad me causa emoción el hecho de saber que viene gente de Perú a verte. Es una de las cosas más bonitas para un peruano, como si fuera un colombiano y estuviera toreando en Perú.
El año pasado estuvo en Manizales como novillero. Ahora como matador de toros, ¿cómo ha vivido esa transición?
Se nota más que nada por el toro. Creo que entre los tres años del toro, primero como novillo y luego torear uno de cuatro años que ya es un toro, pues ese año se nota muchísimo. El toro cambia, no solo el tamaño, el volumen y la cara, sino también la exigencia, además de que ellos piensan de otra manera y tienen embestidas diferentes. Pero luego ya con las ganas y la ilusión que uno lleva a la plaza termina siendo casi lo mismo.
Cuando no está toreando ni entrenando, ¿a qué se dedica usted?
Yo creo que cuando uno no está haciendo nada se dedica siempre a pensar. Es la única manera de llegar a hacer las cosas y hacerlas como uno quiere. La verdad me gusta mucho jugar golf, tenis, cosas que no hago mucho, pero que me gustan.
El mentor
José Antonio Campuzano es el maestro, mentor y apoderado de Andrés Roca Rey y es quien vive con angustia y concentración cada lidia de su pupilo. Campuzano, oriundo de Sevilla (España) y afamado torero retirado, reconoce que Andrés Roca Rey es una promesa que se cumple con el paso del tiempo y las faenas.
¿Usted cómo vivió la corrida del martes viendo a Andrés?
Yo lo vivo muy intenso. El martes, sin duda, sufrí muchísimo. El primer toro no era bueno, muy complicado y que le pidió la cédula a Andrés como matador de toros. Había que ponerle muchísimo y Andrés le puso mucho más.
Hay que tener muchos años de experiencia para poder hacerle lo que le hizo Andrés, pero él es un torero con capacidades tan grandes que esa experiencia que el toro exigía él la sacó sin tener los años que cualquiera tendría de experiencia y como tiene la capacidad, anduvo con el toro de forma sensacional.
Con el segundo disfruté muchísimo y a la vez lo sufrí. En cada muletazos empujaba al toro, pero sin duda en ese aspecto Andrés me sorprende todos los días porque hace cosas que tú no te las esperas y esa capacidad no la tiene todo el mundo.
¿Cómo sintió ese momento en el que se resolvió el indulto?
Yo me sentí como si hubiera sido yo quien estaba delante del toro. Yo lo de Andrés lo llevo muy personal y es una continuidad de mi vida como torero. Ni ayer, ni hoy me cambio por nadie.
¿Descansó en la noche?
No.
¿Durmió?
No.
¿Pensó en el toro ‘Incógnito’?
¡Uf!, muchísimo. Yo cuando toreaba un toro bien, esa noche no dormía. Yo toreaba en sueño, despierto y esa noche me levantaba. Anoche me pasó igual, pues tenía tan metida la faena y esa emoción tan grande que no pude dormir. Hoy me siento reventado, como si hubiera estado toda la noche corriendo.
Andrés Roca Rey
Fecha de nacimiento: 21 de octubre de 1996.
Lugar de nacimiento: Lima (Perú)
Primer paseíllo: Plaza de toros de Juriquilla (México) el 2 de mayo del 2008.
Debut con picadores: 1 de junio del 2014 en Captieux (Francia)
Alternativa: 19 de septiembre del 2015 en Nimes (Francia)
Padrino: Enrique Ponce
Testigo: Juan Bautista
Apoderado: José Antonio Campuzano
Foto | Cortesía | LA PATRIA
En la Plaza de toros El Soldado, el matador de toros Andŕes roca Rey compartió con los estudiantes sus experiencias.
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