Los cánones de la seguridad en motocicletas aconsejan que a la hora de algún daño es mejor remplazar que arreglar. En eso coinciden algunos mecánicos de Manizales consultados por LA PATRIA.
Sin embargo, también es posible ante pequeños daños tener en cuenta la reparación como una alternativa económica y técnicamente viable.
Por ejemplo, el mal estado de la red vial afecta a los motociclistas, las motos y sus rines. Caer en un hueco o en una alcantarilla destapada sugiere al menos un daño inmediato: la abolladura de un rin.
Estas son piezas metálicas que sirven como soporte de las llantas y, a su vez, de toda la moto. Pueden ser de radios, estampados en chapa o de fundición.
Los de radios, que pueden ser de acero o de aluminio, son de alta duración, requieren mantenimiento y, por cierto, se encuentran repuestos como aros, radios y campana o manzana. Los de radios aún se usan en motos de bajo costo, de competencias o de prestaciones de fuera de carretera donde se necesita flexibilidad.
Los estampados en chapa son soldados por la manzana y vienen ganando terreno por su bajo costo de producción y porque soportan llanta sellomática. Los de chapa se aplican a pequeñas motocicletas tipo scooter.
Por último están los fundidos por vaciado, de aleaciones ligeras como el aluminio y otros metales (comúnmente llamados de aleación o de aspas). Por esta razón se prefieren para el resto de las motos que ruedan por asfalto. Ofrecen la posibilidad de uso de llanta sellomática, pero no son de fácil reparación.
Cambiar o no
Según el mecánico de una ensambladora de motos en la ciudad, las consecuencias de estrellar el rin contra el filo de un cráter urbano pueden ir más allá del susto. Desde una simple abolladura hasta la fractura del material, lo que en ocasiones sugiere el cambio inmediato por razones de seguridad.
"Sin embargo, la reparación o rectificación es posible siempre y cuando el material de fabricación permita hacerlo. Generalmente es más factible con rines elaborados en lámina de acero o de aluminio, que en rines de aspas de aleación por las características y propiedades de los materiales (ver infográfico)", aseguró.
Tenga en cuenta que la gran mayoría de los rines son susceptibles de arreglo o reparación de sus abolladuras, golpes y fracturas del material (las populares chitiaduras).
Añadió que los rines de acero se enderezan y centran igual que los de bicicleta con el ajuste de los radios. Las abolladuras, por lo general, se solucionan con prensa y muchas veces con un martillo especial de pasta para latonear los golpes. Hay que anotar que estos rines, usualmente, son de bajo costo (a no ser que sean de origen japonés) y cuando el daño es grave, lo mejor es cambiarlos.
Los rines de aluminio pueden sufrir fracturas del material: cuando no son graves se pueden soldar con equipos especiales. Estos rines son mucho más costosos y, por tanto, en un porcentaje mayor se reparan y no se cambian con mucha frecuencia.
En un taller de la carrera 19 manifestaron que todo tipo de rin es reparable (de radios y de aleación), siempre y cuando la magnitud del daño lo permita. "Cuando las fisuras son muy grandes o hay pérdida de material, lo recomendable es hacer la sustitución del mismo sin importar la gama que sea la motocicleta".
Lo que vale chocarse
Los accidentes de tránsito se consideran un serio problema social y de salud pública en el mundo por el número de lesionados y de muertos, y por los recursos económicos que deben destinarse para su atención y recuperación. Por eso es vital hacerle mantenimiento a la moto y cambiar las piezas deterioradas.
El costo promedio que supone la atención de un accidentado en motocicleta, en cifras del Hospital San Vicente de Paúl, de Medellín, es de 8 millones de pesos durante los nueve días de permanencia de la víctima.
Esta es apenas una cifra sobre el alto costo de los accidentes en moto, en la que no se cuentan gastos que se generan una vez sale del centro hospitalario, en drogas, prótesis, terapias e incapacidades.
Para César Restrepo, quien perdió un pie en un accidente, el costo fue mucho mayor: siete meses sin empleo, pues es trabajador independiente (5 millones de pesos), una prótesis (13 millones de pesos) y los gastos en drogas y recuperación (400 mil pesos).
Esta también es insignificante cuando se estima la pérdida económica para una persona y su familia en caso de quedar con consecuencias que le impidan volver a insertarse en el mercado laboral, y teniendo en cuenta que la vida y la capacidad de desarrollarse son incalculables.
Una aproximación se podría lograr teniendo en cuenta la esperanza de vida en Colombia (73,4 años), la franja de edad que presenta mayor cantidad de accidentados para el año (entre 18 y 29 años) y el salario mínimo que es de 589.500 pesos.
Es decir que con un estimativo de 40 años de capacidad laboral la pérdida podría calcularse en cerca de 282 millones de pesos.
Otras piezas*
*Filtro de aire: se aconseja usar siempre el recomendado por el constructor de la moto, pues si se compra uno de marca no reconocida, se corre el riesgo de que haya sido manufacturado si las normas exigidas y resulte un fiasco. Límpielo a los primeros mil kilómetros y luego cada 3 mil. Se cambia cada vez que se reemplaza el aceite de motor, es decir, transcurridos 4 mil o 5 mil kilómetros, o con más frecuencia si se transita por zonas polvorientas.
*Bujía: si es motor de dos tiempos, reemplace cada 5 mil kilómetros. Para cuatro tiempos, cada 10 mil.
*Batería: su vida útil debe ser de al menos dos años, pero todo depende del estado general del sistema eléctrico.
*El tren de arrastre: cambie por lo menos cada tres meses.
*Pastillas: Cuando la palanca de freno se pone larga, el nivel del depósito de líquido de frenos disminuye o cuando al pulsar la palanca se oye un chirrido espantoso, es hora de cambiarlas. Al reemplazarlas no exceda la velocidad y guarde la distancia durante los primeros 50 kilómetros.
*Líquido de frenos: cámbielo cada cinco meses o 10 mil kilómetros.
*Luces: hágalas inspeccionar por lo menos dos veces al año.
*Tuercas del exosto: Apriételas a los 5 mil, 10 mil y 15 mil kilómetros.
*Filtro de aceite: reemplace a los mil, 5 mil, 10 mil y 15 mil kilómetros.
*Cadena de transmisión: limpie, lubrique e inspeccione cada mil kilómetros.
*Manguera de frenos: reemplace cada cuatro años.
*Pernos y tuercas del motor y chasís: apriete a los mil, 5 mil, 10 mil y 15 mil kilómetros.
*Sondeo entre algunos talleres de Manizales y Manuel de mecánica para motos de Carlos Vargas.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015