
Se les fabricó un contenedor especial que permite la ventilación, lo mismo que contenedores de alimentos y aguas pegados al piso, en guacales construidos en madera resistente a la humedad y una malla que permite que la orina y las excretas caigan al fondo y no tengan contacto permanente.
Luego de un prolongado viaje desde el Aeropuerto de Frankfurt, que -junto con su escala en Bogotá se prolongó por casi 24 horas- llegaron ayer a las 3 de la tarde a Pereira las cinco suricatas que entrarán a enriquecer la fauna silvestre del Zoológico Matecaña.
Son dos machos y tres hembras, cuyo periplo comenzó en Budapest, donde pertenecían al Zoológico Zoyare, de la capital, Hungría.
Las suricatas fueron recibidas en el Aeropuerto ElDorado de Bogotá por el veterinario Néstor Varela, del Zoológico Matecaña, quien confirmó su buen estado de salud, a pesar de las dificultades del viaje.
Una vez en el Aeropuerto Internacional Matecaña de Pereira, fueron puestas en cuarentena, antes de su exhibición en el nuevo hábitat que se tiene dispuesto con todas las comodidades para el disfrute de los visitantes.
El director del Zoo, Jesús Alberto González Villegas, reveló que los costos superan los 150 millones de pesos. Para la Sociedad de Mejoras, propietaria del Zoológico, el traer a Colombia estos individuos de la fauna silvestre originarios del África, se había convertido en todo un reto que tardó diez meses en concretarse, siendo necesaria la contratación de un importador especializado.
Según el veterinario, estos animales por la conformación de grupos familiares, despiertan en el público mucha empatía y en las familia mucho interés.
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