EFE | LA PATRIA | Bruselas
La cúpula de la Asamblea Parlamentaria Eurolatinoamerica (Eurolat) comienza hoy. Será un encuentro de tres días en Bogotá, el primero presencial dpnde se hablará de la situación tras la pandemia, con vistas a impulsar la relación entre ambos en un escenario global "muy competitivo" y para buscar juntos soluciones a los problemas de la desigualdad o la recuperación poscovid.
El eurodiputado socialista español Javi López, copresidente de Eurolat, explicó a Efe, antes de emprender el viaje, la necesidad de que la UE y Latinoamérica reactiven su "relación birregional" y empiecen también a usar los acuerdos de asociación que Bruselas ha ido cerrando con los diferentes países latinos, aunque algunos de ellos aún no están ratificados.
"Nosotros desde Europa hemos, en muchas ocasiones, acabado centrando nuestra atención estratégica durante los últimos años en el norte de África, Oriente Medio y el este (de Europa) por tener una vecindad muy conflictiva. Y es necesario que las relaciones con América Latina tomen impulso", incidió López.
A su juicio, Europa necesita reforzar este vínculo "en un mundo con un contexto geopolítico muy competitivo", pero también lo requiere Latinoamérica para recuperarse del fuerte impacto económico derivado de la pandemia, "que ha agravado uno de los fenómenos que atraviesa Latinoamérica: la desigualdad".
La reunión de estos tres días en Bogotá reunirá a los 14 miembros europeos y latinos de la Mesa Ejecutiva de Eurolat, que tiene previsto aprobar una declaración conjunta y celebrar encuentros con distintos mandatarios de países de la región, particularmente con políticos colombianos.
"Es necesario que reactivemos nuestra relación birregional, utilicemos los acuerdos de asociación que se están también negociando o a punto de firmar -tenemos el caso de Chile o Mercosur-, y tengamos una agenda para la recuperación económica que haga frente a la crisis de deuda y a la crisis climática que enfrenta la región", añadió López.
Preguntado por el bloqueo actual para ratificar el acuerdo de la Unión Europea y el Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay, cuya negociación se cerró en junio de 2019, el eurodiputado español reconoció que el proceso de revisión de este tipo de acuerdos se ha "politizado" y "ha derivado a debates alrededor de la globalización y sus límites, debates legítimos e incluso necesarios".
La ratificación de este pacto no se ha llevado a cabo, por las reticencias, principalmente de Francia y del Parlamento Europeo, a la política medioambiental del presidente brasileño, Jair Bolsonaro.
Austria también mantiene un veto sobre el acuerdo, en un movimiento que apoyan también Irlanda, Bélgica y Países Bajos.
"Cada vez son más divisivos los acuerdos, también aquí en el Parlamento Europeo, y tienen una mayor atención. No debiera eso de ir en detrimento de tener una política exterior con alianzas estratégicas que también tuviera en una de las patas la economía y el comercio", puntualizó.
Dicha política, añadió, permitiría lograr "acuerdos exigentes en materia de estándares laborales, medioambientales, que permitieran empujar al resto del mundo y a nuestros socios comerciales a una mayor calidad de vida para nuestros ciudadanos".
Sin embargo, respecto al acuerdo con Mercosur, admitió ver "muy complicado" que su ratificación se reactive hasta después de las elecciones en Brasil, "que pudieran dar un resultado esperanzador con un cambio en el país", y en Francia, a partir de las cuáles el bloque europeo podría "tener un debate sereno" sobre su relación con el Mercosur.
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