Durante los últimos años ha cambiado la forma en la que nos relacionamos gracias a los diversos usos y avances de la tecnología. Como resultado hemos experimentado un cambio de la economía tradicional a una centrada en usar todas las características propias de la era digital, donde la velocidad, seguridad y almacenamiento de datos son de vital importancia.
De la tradición a la digitalización
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Inspirado en el éxito de las compras online, mercados tan tradicionales como la industria inmobiliaria y de inversión han tenido que hacer la transición a la digitalización en sus procesos para mantenerse vigentes. Desde su implementación, la automatización de varios procesos ha garantizado la eficiencia de ellos.
Esto incluso ha cambiado la forma de hacer negocios. Tal es el caso del trading, que ha surgido como respuesta a las criptomonedas y CFDs como herramientas de inversión, las cuales se encuentran disponibles en diversos brókeres, ellos permiten operar activos de la bolsa de valores y criptoactivos con una pequeña inversión sin necesidad de poseerlos.
En el caso del sector inmobiliario, el uso de las herramientas tecnológicas para agilizar los procesos de compra venta, alquiler, hipotecas e incluso las escrituras, ha estado conduciendo a un crecimiento acelerado en este sector en el último año, permitiéndole a estas empresas consolidarse rápidamente y expandirse.
Los agentes del cambio
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Actualmente en Medellín se está desarrollando un plan piloto para digitalizar el proceso de compraventa de los inmuebles mediante la escritura inmobiliaria digital. En este proceso todas las partes involucradas trabajarán en conjunto, alojando toda la documentación en la web, garantizándole al comprador un proceso más rápido. Esto elimina los largos periodos de espera entre cada organismo, e incluso le permite realizar la compra independientemente de su ubicación, reduciendo los costes burocráticos y de traslado.
Para las agencias inmobiliarias de vanguardia, incorporar las nuevas tecnologías en los procesos de gestión, planificación, compra, venta, incluyendo realizar las escrituras inmobiliarias, e incluso las hipotecas de forma digital, les ha permitido abrirse paso exitosamente en Colombia y otros países.
Una de estas proptechs es Habi, que sale del rol de intermediario inmobiliario, dedicándose exclusivamente a la compra y venta directa de propiedades, encargándose ellos mismo de realizar los trámites notariales e hipotecarios, así como de reacondicionar el inmueble. Su mayor atractivo es su algoritmo propio de 25 variables con el que realizan los avalúos. Así mismo, los clientes pueden ver el resultado final en los tours virtuales para confirmar en su visita su decisión de compra. Gracias a esta digitalización de los procesos han logrado posicionarse como uno de los líderes inmobiliarios de Colombia, con miras a expandirse a otros países.
Un modelo similar fue la razón del éxito de la startup La Haus. Usando una plataforma transaccional 100% virtual, herramientas digitales basadas en machine learning e inteligencia artificial, y proveyendo de asesorías especializadas completamente gratuitas, La Haus, logró vender más de 4000 inmuebles solo en 2020. Con esto, atrajo inversores para la segunda ronda de capitalización de más de 100 millones de dólares, expandiendo operaciones por toda Colombia y México.
Al poder simplificar los procesos y transmitir confianza a las personas para obtener la vivienda más acorde a sus necesidades, los inmuebles se vuelven más accesibles para los futuros propietarios dinamizando al sector y con él, la economía y el bienestar de todos los colombianos.
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